Corea del Norte anuncia éxito en la prueba de un misil hipersónico de combustible sólido: ¿Qué es?

SEÚL.-La agencia estatal norcoreana KCNA informó el miércoles que Corea del Norte ha probado con éxito un nuevo misil hipersónico de combustible sólido de medio y largo alcance. Este anuncio sigue a la reciente prueba, el martes, de un supuesto misil balístico de alcance intermedio, lo que ha generado una rápida condena por parte de Corea del Sur, Japón y Estados Unidos.

El líder norcoreano, Kim Jong Un, supervisó personalmente el lanzamiento, según KCNA, quien lo calificó como una demostración de la “superioridad absoluta” de la tecnología de defensa norcoreana. Kim afirmó que esta nueva arma estratégica demuestra que Corea del Norte ha convertido todos sus misiles tácticos, operativos y estratégicos en misiles de combustible sólido, con control de ojivas y capacidad de nuclearización.

Los misiles hipersónicos son particularmente difíciles de interceptar, y aquellos con combustible sólido ofrecen una mayor movilidad y facilidad de almacenamiento, lo que los hace capaces de ser lanzados con poco tiempo de antelación.

Esta prueba sigue a otra realizada a finales de marzo, que consistió en una prueba terrestre de un motor de combustible sólido para un nuevo tipo de misil hipersónico de alcance intermedio.

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Reino Unido también se unió a las voces de condena, señalando que estas acciones violan múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.

¿Qué es el combustible sólido?

El combustible sólido es un tipo de propulsante utilizado en cohetes y misiles que se caracteriza por su estado físico sólido en lugar de líquido. Consiste en una mezcla de componentes químicos sólidos que, al combinarse o reaccionar, generan gases que producen la propulsión necesaria para el vuelo.

En contraste con los propulsores líquidos, que suelen requerir sistemas de alimentación y almacenamiento más complicados, los propulsores de combustible sólido son más simples y robustos. Además, son menos propensos a fugas y más fáciles de manipular y transportar, lo que los hace especialmente atractivos para aplicaciones militares donde la movilidad y la preparación rápida son importantes.

Sin embargo, los propulsores de combustible sólido tienen limitaciones en términos de control de la potencia y la duración de la combustión, ya que no pueden ser apagados una vez iniciada la ignición. Por lo tanto, su uso es más común en aplicaciones donde se requiere una rápida respuesta y no es necesario ajustar la potencia de empuje durante el vuelo, como en misiles balísticos y cohetes de lanzamiento.