Aplicación de vacuna contra Covid-19 de Johnson & Johnson es suspendida en Sudáfrica
La inmunización de la población sudafricana se verá retrasada debido a que esta es la única vacuna que se usa contra el Covid-19 en este territorio.
SUDÁFRICA.- Luego de que se registraran casos de coágulos sanguíneos que podrían estar relacionados con la vacuna contra el Covid-19 de Johnson & Johnson, el ministro de Salud, Zweli Mkhize, anunció que se suspendería la aplicación de este biológico en Sudáfrica.
Esta decisión generaría un retraso en la inmunización de la población debido a que esta es la única vacuna que se usa contra el Covid-19 en ese país.
Hemos decidido suspender voluntariamente su uso hasta que la relación de causalidad entre el desarrollo de coágulos sanguíneos y la vacuna de Johnson & Johnson se haya analizado suficientemente", anunció Mkhize, durante una rueda de prensa en línea.
Este martes la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) y los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) recomendaron detener el uso de la vacuna de Johnson & Johnson, fabricada en Estados Unidos, luego de que se registrara un caso extraño de coágulos sanguíneos que podría estar relacionado con la aplicación del antígeno.
Por su parte Johnson & Johnson decidió retrasar la entrega de esta vacuna en el territorio europeo.
Ante esto Mkhize, señaló que hasta el momento no se ha registrado ningún caso de coágulos sanguíneos entre la población sudafricana ya vacunada, pero que el anuncio hecho por la FDA no se tomará a la ligera.
"Habida cuenta de los datos preliminares disponibles, nuestros científicos confían en que la decisión de la FDA se tomó únicamente por precaución, y esperamos que no conduzca a la retirada total de la vacuna de Johnson & Johnson", aclaró Mkhize.
Hasta la fecha Sudáfrica ha vacunado a cerca de 290 mil trabajadores de la salud, y planea empezar la segunda fase de la campaña de vacunación el 17 de mayo, donde se inmunizará a trabajadores esenciales y adultos mayores de 60 años.
Las autoridades sudafricanas se han negado a usar la vacuna fabricada por AstraZeneca y la Universidad de Oxford debido a que se considera menos efectiva contra la nueva variante nacida en ese país.