El calendario de 2026 será idéntico al de 2009 y al de otros años sin que falle ninguna fecha; te contamos por qué ocurre esta coincidencia y qué calendarios antiguos te servirán por completo el próximo año

En el calendario gregoriano, que es el que se usa en México y en la mayor parte del mundo, los calendarios se repiten cuando coinciden dos factores clave:

• el día de la semana en que inicia el año
• y si el año es bisiesto o no

Cuando ambos elementos son iguales, todas las fechas caen en los mismos días, lo que permite reutilizar calendarios impresos de otros años.

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¿Cómo será el año 2026?

El año 2026 será un año común, es decir, no bisiesto, y comenzará en jueves. Esta combinación es la que determina qué calendarios pasados se pueden volver a usar sin ningún ajuste.

Al no tener 29 de febrero, el orden de los días se mantiene estable durante todo el año, lo que facilita que las fechas coincidan exactamente con otros años que tuvieron la misma estructura.

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Calendarios que se pueden reutilizar en 2026

Debido a que 2026 inicia en jueves y no es bisiesto, los calendarios que también cumplen con estas condiciones son totalmente válidos. Entre ellos se encuentran:

• 2015
• 2009
• 1998
• 1987

Cualquiera de estos calendarios puede utilizarse en 2026, ya que los días y las fechas coinciden de forma exacta de enero a diciembre.

Por ejemplo, si el 1 de enero cae en jueves, lo mismo ocurrirá en todos esos años, y así se mantiene la correspondencia durante los 365 días.

¿Por qué no todos los años funcionan?

No basta con que dos años estén separados por el mismo número de semanas. La presencia de un año bisiesto rompe la secuencia normal del calendario, ya que agrega un día extra en febrero y desplaza todas las fechas posteriores.

Por eso, un calendario de un año bisiesto no sirve para un año común, aunque ambos inicien el mismo día de la semana. Este detalle explica por qué las coincidencias no se dan todos los años y por qué algunas se repiten más que otras.

Un ciclo que se repite

El calendario no avanza de forma totalmente aleatoria. Sigue patrones matemáticos claros, lo que permite que años como 2026 compartan estructura con años anteriores.

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Así, si conservas un calendario de 2015, podrás volver a usarlo sin problema en 2026, con la certeza de que todas las fechas caerán en el día correcto.

¿Para qué sirve saber esto?

Saber qué calendario se puede reutilizar tiene usos prácticos y curiosos. Algunas personas lo aprovechan para ahorrar en calendarios impresos, otras por organización personal, y también es un dato común en escuelas, oficinas y planeadores que reutilizan formatos antiguos.

Además, es una forma sencilla de entender cómo funciona el paso del tiempo dentro del calendario y por qué, cada cierto número de años, las fechas vuelven a alinearse.

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