¿Trump podría ser revocado de su segundo mandato como presidente de Estados Unidos debido a su relación con Jeffrey Epstein? Esto se sabe

Washington.— La polémica relación entre Donald Trump y el fallecido financiero Jeffrey Epstein, acusado de abusar de decenas de menores, se ha convertido en uno de los mayores focos de presión política para el presidente estadounidense en su segundo mandato.

Aunque expertos señalan que el riesgo de una acusación penal es mínimo, la sombra del caso podría golpearlo donde más le duele: su base conservadora y el control republicano del Congreso rumbo a las elecciones de 2026.

El caso resurgió con fuerza después de que un juez autorizara la divulgación de documentos y transcripciones del gran jurado que investigó a Epstein en Florida, tras la aprobación de una nueva ley que obliga a transparentar todos los archivos relacionados con el magnate.

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Trump, en la mira de su propia base

De acuerdo con la académica Gabriela de la Paz, experta del Tec de Monterrey, el mayor riesgo para Trump no es legal, sino político: “El riesgo principal para el mandatario es que pierda parte del apoyo de su base de votantes, porque son un grupo que ha hecho mucho énfasis en estar en contra de la pedofilia”, explicó.

La especialista recordó que teorías conspirativas como Pizzagate y movimientos como QAnon surgieron precisamente entre seguidores de Trump, que convirtieron el combate al abuso infantil en un pilar ideológico.

Incluso señaló que Trump fue señalado en documentos que describen cómo adolescentes contratadas por Epstein declararon haber sido explotadas sexualmente. El presidente habría intentado frenar la divulgación de esos archivos, según antecedentes del caso.

Bajo riesgo penal, pero con impacto político

A pesar de la controversia, De la Paz considera poco probable que Trump enfrente cargos criminales, pues los nombres de figuras públicas —incluido él— fueron eliminados de los expedientes por razones de privacidad. Además, tanto el Departamento de Justicia, como el FBI y personajes como Pam Bondi y Kash Patel, cercanos al mandatario, tienen control sobre la información clave.

En ese sentido, cualquier acusación dependería más de una decisión política que de pruebas contundentes. “No hay evidencias que muestren que Trump participó en tráfico de personas u otra conducta delictiva”, afirma la académica.

Un daño real a la credibilidad

Aunque legalmente el mandatario parece estar a salvo, su credibilidad interna sí podría verse afectada.De la Paz compara el efecto con el escándalo de Bill Clinton y Monica Lewinsky:la población podría separar la vida privada del desempeño presidencial, pero la sensibilidad del tema infantil lo vuelve más peligroso.

En cuanto al impacto internacional, el golpe sería limitado:“Ningún líder romperá una relación estratégica con Estados Unidos por este caso”, sostiene.

Sin embargo, la imagen de Trump podría deteriorarse en Europa, donde el tema de trata y abuso tiene especial sensibilidad.

Riesgo electoral

El riesgo aumenta conforme se acercan las elecciones legislativas de 2026.El movimiento MAGA ya muestra molestia por el aumento en el costo de vida y los aranceles impuestos por Trump, por lo que un escándalo ligado a abuso de menores podría encender aún más el descontento.

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De la Paz advierte que si alguna víctima decide hablar públicamente cerca de la fecha electoral, el daño sería impredecible:

“Sería una bomba de consecuencias impredecibles para las votaciones”, afirma.“Tal vez no le cueste la Presidencia, pero sí podría romper la mayoría republicana en ambas cámaras”.

Por ahora, miles de archivos del caso permanecen sin publicarse, y el fantasma de Epstein sigue acechando a un Trump que busca retener el poder político mientras su pasado amenaza con alcanzarlo.

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