Cruces fronterizos caen más del 70% por inseguridad; trabajadores guatemaltecos temen entrar a México

Ciudad de México.– El aumento de la violencia relacionada con el crimen organizado en la frontera sur de México ha provocado una drástica disminución en el flujo de trabajadores guatemaltecos que cruzan diariamente para laborar en sectores como el agrícola, la construcción y los servicios.

Según datos del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM), los cruces fronterizos han caído hasta en un 89% en algunos puntos clave como Tecún Umán II, y en general se ha registrado una caída del 72.2% en trámites de salida hacia México desde esa región en comparación con 2023.

Entrada a México desde el sur

Por primera vez en más de dos décadas, las solicitudes de tarjetas de visitantes regionales, que permiten la entrada legal a México, cayeron 25%. Mientras en el primer semestre de 2023 se demandaban alrededor de 350 mil tarjetas, en 2025 apenas se han solicitado 87 mil 500.

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La inseguridad en estados como Chiapas, Tabasco y Campeche, dominados en parte por disputas entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa, ha provocado el temor entre los trabajadores guatemaltecos, quienes prefieren quedarse en su país pese a los bajos salarios.

Desde 2021, la violencia en Chiapas se ha intensificado, con más de 15 mil desplazados internos y múltiples enfrentamientos armados. Comerciantes y contrabandistas guatemaltecos también han denunciado extorsiones por parte de grupos criminales al cruzar con mercancía hacia México.

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Incluso actividades culturales y educativas se han visto afectadas. Según confirmó la oficina del gobernador de San Marcos, Guatemala, hace tres meses un grupo de guatemaltecos no pudo asistir a un taller en Tapachula por el cobro ilegal de un “impuesto” en el paso fronterizo.

Ante esta situación, las autoridades de ambos países sostuvieron una reunión del Grupo de Alto Nivel de Seguridad (GANSEG) tras un incidente en el que policías estatales mexicanos ingresaron sin autorización al territorio guatemalteco. Se acordó reforzar la vigilancia con drones y tecnología como un perro robot, y realizar operativos conjuntos.

Por su parte, el programa binacional de Movilidad de Trabajadores Agrícolas también ha sufrido una baja: en 2024, solo llegaron 52 mil 168 trabajadores, una reducción respecto al año anterior.

El experto en migración y seguridad, Javier Urbano, advirtió que “la frontera sur de México carece de la infraestructura de seguridad de la frontera norte” y añadió que muchos guatemaltecos, con memoria viva del conflicto armado interno que vivió su país, evitan cualquier situación que les recuerde a la guerra. “No quieren enfrentarse otra vez a que los maten”, afirmó.