Así operan los cárteles mexicanos para reclutar a militares colombianos: mensajería directa y empresas fachada

Los cárteles del narcotráfico en México han ampliado sus redes de reclutamiento hacia el extranjero, particularmente en Colombia, donde buscan incorporar a soldados activos o retirados con formación especializada en explosivos, inteligencia y combate.

De acuerdo con testimonios recogidos por Milenio, esta captación ocurre a través de mensajes directos por aplicaciones como WhatsApp y Telegram, sin necesidad de intermediarios.

Un militar colombiano en servicio activo, que prefirió permanecer en el anonimato, relató que ha recibido ofertas para participar como mercenario en México. Según su testimonio, los grupos criminales obtienen ilegalmente datos personales como hojas de vida y números telefónicos para hacer los contactos.

México

Por dos mil pesos, la presunta líder “narcosatánica” de la organización criminal Artistas Asesinos, ordenaba mutilaciones de personas para ofrecerlas a la Santa Muerte

Llegan mensajes ofreciendo trabajo en otros países, y varios son para grupos mexicanos. Usan los mismos canales que se emplean para otros destinos como Ucrania”, explicó.

Los ofrecimientos incluyen contratos anuales con remuneraciones significativamente mayores al salario promedio de un soldado en Colombia, aunque también establecen reglas estrictas como incomunicación total, confidencialidad sobre la ubicación y ausencia de registros de identidad.

Además del contacto directo por mensajería, el reclutamiento también se realiza a través de empresas de seguridad privada legalmente constituidas en Colombia. Algunas de estas firmas, operadas por exmilitares o personal activo, han sido señaladas como posibles vehículos para vincular personal con estructuras criminales en el extranjero.

¿Cómo llegan a México?

La ruta de traslado a México incluye dos vías principales: una aérea —a través de la Ciudad de México o Cancún— y una marítima que parte de la frontera entre Colombia y Ecuador, siguiendo una ruta similar a la utilizada para el tráfico de drogas hacia el norte del continente.

Autoridades colombianas reconocen el fenómeno. En entrevista con Milenio, el cónsul general de Colombia en México, Alfredo Molano Jimeno, confirmó la participación de al menos un militar activo en actividades de reclutamiento.

Según Hugo Acero Velázquez, asesor en temas de seguridad, este fenómeno ha ido en aumento desde la firma de los acuerdos de paz con las FARC en 2016, que dejó fuera de servicio a más de 50 mil soldados profesionales.