Advierten de sustancia cancerígena por mal uso de freidoras de aire; esto es lo que debes saber
La ciencia sigue investigando los efectos de la acrilamida, pero las recomendaciones actuales subrayan la importancia de una cocción adecuada para evitar posibles riesgos cancerígenos.
El cáncer sigue siendo una de las principales preocupaciones de salud a nivel mundial. Esta enfermedad, caracterizada por el crecimiento descontrolado de células en el cuerpo que pueden formar tumores, puede tener diversas causas.
Según el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, el cáncer puede surgir por errores en la multiplicación de las células, factores hereditarios o por daños en el ADN debido a sustancias perjudiciales.
En este contexto, una de las advertencias más recientes de los expertos se centra en los riesgos asociados a la exposición a ciertas sustancias químicas, como la acrilamida.
¿Qué es la acrilamida y por qué es peligrosa?
La acrilamida es una sustancia química que se forma en los alimentos cuando se someten a altas temperaturas, como al freírlos o tostarlos. Se genera especialmente en alimentos que contienen hidratos de carbono (glucosa) y aminoácidos, como la asparagina. Entre los alimentos más comunes que pueden contener acrilamida se encuentran las papas fritas, el pan tostado y el café.
De acuerdo con un informe de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (México), la acrilamida puede representar un riesgo para la salud, afectando la seguridad alimentaria.
Tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) han clasificado esta sustancia como cancerígena. Asimismo, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) de España alerta sobre la toxicidad de la acrilamida y su potencial para causar cáncer.
Freidoras de aire bajo la lupa
Recientemente, las freidoras de aire han ganado popularidad como una alternativa saludable para cocinar, ya que permiten reducir el uso de aceite. Sin embargo, especialistas en salud han emitido una advertencia sobre el uso de estas freidoras debido al riesgo de formación de acrilamida si los alimentos se cocinan a temperaturas demasiado altas.
Los expertos sugieren que, para evitar la formación de acrilamida y reducir el riesgo de cáncer, los alimentos no deben cocinarse a temperaturas superiores a los 195 grados Celsius. Controlar la temperatura es clave para que el uso de freidoras de aire no represente un riesgo para la salud.
Recomendaciones para un uso seguro de freidoras de aire
- Evitar temperaturas muy altas: Cocina los alimentos por debajo de los 195 grados Celsius para reducir la formación de acrilamida.
- Controla los tiempos de cocción: No sobrecalientes los alimentos ni los cocines más tiempo del necesario.
- Opta por alternativas saludables: Aunque las freidoras de aire permiten reducir el uso de aceite, también es importante balancear la dieta con alimentos frescos y mínimamente procesados.
La ciencia sigue investigando los efectos de la acrilamida, pero las recomendaciones actuales subrayan la importancia de una cocción adecuada para evitar posibles riesgos cancerígenos.
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