Activistas denuncian crisis migratoria en la CDMX: albergues rebasados y sin apoyo oficial

Ciudad de México.- Los albergues de la sociedad civil que prestan ayuda a los migrantes que atraviesan la capital en su camino hacia Estados Unidos están enfrentando una situación crítica. Se encuentran operando con una sobrecarga que triplica su capacidad normal, y lamentablemente, no están recibiendo respaldo alguno por parte de los gobiernos federal y local. Esta preocupante situación fue denunciada por los directores de dos de estos albergues, quienes también expresaron su descontento ante la falta de propuestas migratorias por parte de los candidatos a la presidencia y al gobierno capitalino.

En una entrevista para El Universal, el padre Juan Luis Carvajal Tejeda, quien dirige la Casa del Migrante Arcángel Rafael, con sedes en la alcaldía Iztapalapa y en el municipio de Ecatepec, Estado de México, resaltó que, aunque el Instituto Nacional de Migración (INM) está consciente de su labor, no les brinda más que una ayuda mínima.

El padre, quien también ejerce como coordinador de la Pastoral de Movilidad de la Arquidiócesis, aseguró que todos los albergues en la Ciudad de México, como Casa Mambré, Casa Acogida Formación y Empoderamiento de la Mujer Internacional y Nacional, la Parroquia de la Santa Cruz y la Señora de la Soledad, así como Caritas, entre otros, están desbordados y con capacidad al límite.

Además, mencionó que Clara Brugada, alcaldesa de Iztapalapa, visitó la Casa del Migrante Arcángel Rafael y “la invitó a que no ignore este fenómeno que está viviendo su misma alcaldía con tanta gente”.

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La líder de Casa Tochán, ubicada en la alcaldía Álvaro Obregón, Gabriela Hernández, expresó que se sienten abandonados y que los gobiernos no están atendiendo sus necesidades. Además, señaló que ninguno de los candidatos a la presidencia o al gobierno de la Ciudad de México ha mencionado en sus discursos planes para apoyar a las organizaciones y refugios que ayudan a los migrantes en su paso por la capital.

Mientras los gobiernos no tomen en serio y traten de hacer una política pública que realmente beneficie a las poblaciones, porque nosotros como sociedad civil tenemos toda la voluntad de apoyar, pero si el gobierno no hace nada...”, dijo Hernández.

Los líderes de ambas casas migrantes han señalado que el gobierno de la Ciudad de México solo proporciona comida a las 12 del día de lunes a viernes, lo cual resulta insuficiente para cubrir las múltiples necesidades de los migrantes. Además de alimentación, requieren atención médica, legal, psicológica y seguridad.

El padre Carvajal Tejeda destacó que en la Casa del Migrante Arcángel Rafael, ubicada en Iztapalapa, se enfrentan a un sobrecupo significativo, con alrededor de 270 personas alojadas, el doble de su capacidad prevista para 120. La población actual proviene principalmente de países como Venezuela, Colombia, Nicaragua, Ecuador y Afganistán.

Asimismo, describió una situación similar en la sede de la casa migrante en Ecatepec, Estado de México, donde actualmente se atiende a 180 personas, a pesar de que su capacidad es para 80.

Gabriela Hernández, directora de Casa Tochán, informó que actualmente están experimentando una demanda triple. En este momento, están alojando a 100 hombres, en su mayoría provenientes de Venezuela, El Salvador y Afganistán, cuando su capacidad de atención es para 35 personas.

Me parece mentira, yo creí que este gobierno iba a tener mejor escucha y es el que menos escucha. Es muy lamentable, nosotros tenemos aquí ya este año 13, en septiembre, en junio cumplimos 13 años y creo que los avances en cuanto a la lucha por los derechos de los migrantes habíamos avanzado, pero en este sexenio hemos retrocedido”, dijo Hernández.

Admitió que es necesario ofrecer ayuda, ya que en Álvaro Obregón el clima es severo en esta época y los migrantes, que han dejado sus países con la esperanza de una vida mejor y sufren adversidades como extorsiones, abusos, hambre y humillaciones en su camino hacia Estados Unidos, tienen necesidades físicas urgentes.

Los responsables de los refugios instaron a las autoridades y a la sociedad en su conjunto a mostrar empatía hacia la situación de los migrantes y a brindarles apoyo y solidaridad. Asimismo, solicitaron que se respeten sus derechos humanos y se les asegure una migración segura y digna.