Revelan que cárteles mexicanos, ligados a "El Chapo" y al CJNG operan en Qatar
Según detallan, el Cártel de Sinaloa y el CJNG se han asentado en territorio qatarí, contó el experto en narcoterrorismo Johan Obdola.
CIUDAD DE MÉXICO.-Desde hace al menos unos 5 años cárteles de la droga mexicanos ligados a Joaquín “El Chapo” Guzmán, y a Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”, del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), operan en Qatar, revela el medio Milenio.
Según detallan, el Cártel de Sinaloa y el CJNG se han asentado en territorio qatarí, contó el experto en narcoterrorismo Johan Obdola.
“En relación a Qatar, desde el 2017 se detectó la presencia de cárteles de la droga, y a partir de 2018-19, específicamente del Cártel de Sinaloa, y la presencia del algunos cárteles como el de Jalisco Nueva Generación”, mencionó.
Agregó:
El producto principal que ellos manejan es cocaína, pero con muchísimo incremento de lo que tiene que ver con captagón y las metanfetaminas”.
Para entrar a Qatar, los cárteles mexicanos hicieron acuerdos con grupos terroristas en África y Asia, uno de esos aliados es Hezbolá, considerado un grupo terrorista por más de 50 países", denunció.
“Hezbolá es un grupo terrorista que sus fondos provienen de operaciones criminales y de operaciones terroristas… es importante entender este esquema”, contó Obdola.
Indican que los cárteles pagan a Hezbolá para entrenamiento y por el uso de las rutas de la droga en África y Asia que suministran cocaína, captagón y metanfetamina hasta Medio Oriente.
Además afirman que Hezbolá usa el dinero para financiar sus actividades.
Hezbolá además de entrenarlos, les comparte la estructura global que tienen, las rutas, los mercados… absolutamente todo, y los cárteles de las drogas de México trabajan con ellos a nivel global, pero también trabajan en conjunto para nuevas formas constantemente de entrada de droga a los Estados Unidos”, denuncia el experto.
El captagón, también llamado la “cocaína de los pobres”, es una de las drogas que los cárteles mexicanos venden en Qatar, una anfetamina que inhibe el sueño y que tuvo un aumento en su consumo, principalmente entre los migrantes obreros que trabajaron en condiciones cercanas a la esclavitud durante largas jornadas para la construcción de los estadios para el Mundial, señalan.
A pesar del férreo control antidrogas en Qatar, los cárteles mexicanos han logrado filtrarse en la sede mundialista y convertirla en una más de sus plazas.
“Ellos han venido manejando y luchando contra el tráfico de otro tipo de drogas que vienen de Pakistán, de Afganistán, pero el modo operandi de los mexicanos es muy distinto”, dijo Obdola.
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