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El Imparcial / Mexico / Movimiento estudiantil

Así murió Díaz Ordaz, el responsable de la masacre del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco

A pesar de  la magnitud de la masacre, Díaz Ordaz vivió los últimos años de su vida de manera impune, pues nunca se le fincó responsabilidad por aquellos hechos.

CIUDAD DE MÉXICO.- Aunque nunca se le señaló al expresidente Gustavo Díaz Ordaz en vida, la responsabilidad por la matanza de Tlatelolco, en 2005 la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado determinó que sí fue responsable de ordenar la matanza.

A pesar de la magnitud de la masacre, Díaz Ordaz vivió los últimos años de su vida de manera impune, pues nunca se le fincó responsabilidad por aquellos hechos. Sus últimos días los fueron acosados por un cáncer de colón que lo obligó a pasar largas temporadas en el hospital.

El político mexicano pasó mucho tiempo creyendo que tenía una úlcera gástrica, la cual nunca fue encontrada por los médicos; lo que sí detectaron fue problemas de vesícula y un tumor maligno en el hígado.

El 15 de junio de 1979, el expresidente murió en la Ciudad de México, de un paro cardíaco provocado por el cáncer y su cuerpo fue enterrado junto a su esposa, Guadalupe Borja, en el panteón Jardín de la entonces delegación Álvaro Obregón.

Cabe recordar, que dos años antes de su deceso, durante el sexenio de José López Portillo, Díaz Ordaz había sido nombrado embajador de México en España tras el reinicio de las relaciones con la península ibérica.

Días Ordaz: "Se que tengo cáncer"

Esta es nuestra despedida. Sé que tengo cáncer. Y ya me voy a morir. Me queda poco tiempo. Arreglaré mis cosas. El desorden que dejó el que era mi secretario particular. No se apure mi amigo. Nada de tristezas. La muerte es tan natural como la vida.Gustavo Díaz Ordaz, expresidente de México

Ninguno es inmortal. Uno se acostumbra a ver nacer. Y duele ver morir. Tuve una vida plena. Me dio todo. Y yo también todo le estoy a mano. No tengo amarguras. Ni frustraciones. Vamos a esperar, tranquilos, lo que tiene que ocurrir. Yo tengo mi conciencia en paz”, le dijo Díaz Ordaz a su amigo Rafael Moreno Valle, según comentó este último a El Universal.

El expresidente fue homenajeado en el Senado de la República, la carroza fúnebre que transportaba su cuerpo fue escoltada por agentes del Estado Mayor presidencial.

Impunidad

A 53 años de los trágicos hechos en Tlatelolco, se desconoce con exactitud cuántas personas murieron por la orden de Díaz Ordaz, pero se estima que el saldo de aquellos primeros días de octubre del 68 es de entre 300 y 400 muertos, así como mil personas heridas.

El propio expresidente se mostraba orgulloso de los acontecimientos y así lo expresó a los medios cuando concluyó su sexenio.

Pero de lo que estoy más orgulloso de esos 6 años, es del año 1968, porque me permitió servir y salvar al país. Les guste o no les guste, con algo más que horas de trabajo burocrático. Poniéndolo todo, vida, integridad física, peligros, la vida de mi familia, mi honor y el paso de mi nombre a la historia. Todo se puso en la balanza. Afortunadamente, salimos adelante. Si no ha sido por eso, usted no tendría la oportunidad, muchachito, de estar aquí preguntando” dijo, en una declaración que ha quedado para la historia.

Con información de Reporte Índigo

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