Migrantes, entre el crimen y Trump

Bajo una carpa y con el calor extremoso de la región, Luis Ángel observa con una sonrisa que su turno está cerca. Él y su madre tienen más de un mes pernoctando a las afueras de la Garita de San Luis Río Colorado, Sonora.

Al inicio de la fila, un tablón con cuadrículas y números indica el turno para quienes esperan ser procesados para pedir asilo en Estados Unidos. En esta lista se encuentran 142 personas en espera de ser llamadas por autoridades estadounidenses.

Ellos tienen el turno 56. Luis Ángel y su mamá llegaron a esta frontera a principios de este año, desde Cacahuatal, Chiapas. Decidieron no cruzar de manera ilegal y prefirieron pedir asilo en Estados Unidos, esperando en carpas hechizas con lonas a la vista de la fila peatonal para cruzar la frontera.

La espera es de más de un mes para muchos en esta fila compuesta en su mayoría por mexicanos, aunque también hay familias venezolanas en espera de cruzar a Estados Unidos bajo la figura del asilo.

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A muchos de ellos no les será otorgado. Aunque hubo familias de El Salvador, ya no hay presencia de centroamericanos en esta fila. Todos ellos han optado por el cruce ilegal de la frontera y solicitar el asilo al momento de la detención por agentes de la Patrulla Fronteriza del Sector de Yuma.

En lo que va de este año, en este sector se han rebasado ya los 50 mil arrestos, un incremento del doble respecto al año fiscal anterior y más del triple del año fiscal 2017, indican las cifras de esta corporación.

Es en esta región, una de las de mayor incremento de aprehensiones y cruces en el último año, grupos criminales transnacionales y locales en San Luis Río Colorado, han encontrado un nicho para fomentar e incrementar la llegada de centroamericanos que buscan cruzar a Estados Unidos.

REBASADOS

El sector de Yuma, Arizona, ascendió intempestivamente al tercer lugar a nivel nacional con el mayor número de arrestos de migrantes que cruzan de manera ilegal la frontera, la mayoría de ellos solicitando asilo en Estados Unidos.

En lo que va de este año la cifra de arrestos ya rebasó los 50 mil, lo que representa el doble de los 26 mil detenidos en el año fiscal 2018 y más de tres veces la cifra del año fiscal 2017, cuando se detuvieron a 12 mil migrantes.

Más de un millón de dólares en ayuda humanitaria ha sido destinado para cubrir los incrementos en estos arrestos de familias y niños no acompañados, la mayoría de ellos de Centroamérica, informa la dependencia.

Tan solo a finales de mayo, tres grandes grupos de migrantes centroamericanos de hasta 800 personas han sido detenidos, muchos de ellos en la zona este de San Luis, Arizona, donde operan “facilitadores” locales que les ayudan a cruzar el muro fronterizo.

Desde finales de marzo, la Patrulla Fronteriza del sector de Yuma ha liberado a los migrantes en territorio estadounidense luego de que su sistema fue rebasado por el alto número de aseguramientos.

El jefe encargado de la Patrulla Fronteriza en el sector, Carl Landrum, señala que en base a estadísticas, difícilmente un 6.4% de los solicitantes lograrán una resolución favorable a su petición de asilo.

ENTRE EL CRIMEN

En su ruta a esta zona fronteriza, miles de migrantes continúan arriesgando su vida, no solo por las condiciones precarias de su jornada, sino por los grupos delincuenciales que se aprovechan de su vulnerabilidad. Caborca, Sonora, es parte de esta ruta.

En esta ciudad, el 15 de mayo, un grupo de migrantes, entre ellos de Honduras, El Salvador y Cuba, fueron rescatados tras estar varios días en cautiverio por secuestradores que los engañaron con el ofrecimiento de albergue.

Un total de 16 hombres y 8 mujeres, una de ellas embarazada y seis menores de edad, se encontraban privados de la libertad en una casa de la colonia El Ventarrón, donde los retenían para pedir rescate de 500 dólares por cada uno de ellos a sus familiares.

Los delincuentes, cuando llevaron a uno de ellos a un banco a retirar uno de estos pagos, logró pedir ayuda a los números de emergencia y se llevó a cabo un operativo en el que cinco sospechosos fueron detenidos.

El miércoles 22 de mayo, un Juez de Control los vinculó a proceso por los delitos de secuestro agravado y asociación delictuosa. Todos los detenidos, cuatro hombres y una mujer, son de origen hondureño.

Norlan José “N”, de 30 años; Juan Carlos “N”, de 36; Abel Antonio “N”, de 22; José Luciano “N”, de 28 años y Joaida Josabel “N”, de 23 años de edad, se encuentran actualmente en prisión preventiva.

En esta zona “caliente”, también fue desmantelada una red de traficantes en ambos lados de la frontera en un operativo binacional el 18 de mayo, en la que aprehendieron a 19 personas, entre ellos seis hondureños.

En San Luis Río Colorado, basta con recorrer la zona oeste de la avenida Carlos G. Calles para darse cuenta de la impunidad con la que trabajan los “facilitadores” de cruces del lado mexicano que alertan a migrantes sobre el momento indicado para cruzar.

Mochilas, sudaderas y prendas de vestir se han quedado atoradas en la malla de concertina que elementos de la Guardia Nacional han colocado en el cerco fronterizo de esta zona, con el que han pretendido disminuir los cruces ilegales.

El sector de Yuma de la Patrulla Fronteriza ha captado en cámaras de vigilancia la operación de estos grupos, tanto en la zona oeste de la garita de San Luis como en la zona este, en los límites de San Luis Río Colorado. Muchos de los migrantes son alojados en inmuebles cercanos a la frontera y posteriormente son escoltados al cerco internacional, donde les ayudan a cruzar y posteriormente se resguardan en territorio mexicano.

ATORADOS EN LA FRONTERA

Cerca de 19 mil solicitantes de asilo se encuentran esperando su entrada a Estados Unidos en las ciudades fronterizas de México, según revela un estudio de la Universidad de California en San Diego (UCSD).

Luego de la implementación de los nuevos protocolos para protección a los migrantes por Estados Unidos, los solicitantes de asilo deben permanecer en las ciudades fronterizas mexicanas en espera de su audiencia ante un Juez de Migración.

Tiempos de espera más largos en la historia se han derivado de esta nueva política migratoria de Trump tan solo en los últimos tres meses, periodo en el que la lista de espera, como en la que se encuentra Luis Ángel, se incremente a 14 mil personas.

El reporte, producido por la Escuela de Política Global y Centro Estratégico de la UCSD en conjunto con la Universidad de Texas, documenta la manera en la que agentes aduanales de Estados Unidos han regresado a los solicitantes a México. Mexicali, Tijuana y Ciudad Juárez son unas de las ciudades fronterizas con las listas de espera más largas para los solicitantes de asilo, revela el estudio, publicado por el Centro Strauss de la Universidad de Texas.

“Los albergues en las ciudades fronterizas están rebasados y los solicitantes de asilo han comenzado a llegar a ciudades más pequeñas sin infraestructura para atenderlos, muchos de ellos han rentado cuartos de hotel o duermen en las calles, incrementando su vulnerabilidad ante el crimen organizado”, explica Savitri Arvey, uno de los investigadores.