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El Imparcial / Mexicali / Buscadoras de Desaparecidos

Madres de desaparecidos piden a nuevo gobierno cese de impunidad

Indican que desde hace 25 años han desaparecido más de 3 mil personas en el Estado.

MEXICALI, Baja California.- La organización de madres de desaparecidos en Baja California, pidió al próximo Congreso y Gobierno del Estado, que se solucionen los casos de desapariciones en Baja California que siguen en la impunidad.

El profesor Ignacio Gastelum Ruiz, asesor de la Organización Madres Unidas y Fuertes de Mexicali, señaló que durante todas las administraciones pasadas, hubo impunidad en estos casos, por lo que se lanzó un llamado a los siguientes gobiernos.

Estiman que desde hace 25 años, han desaparecido más de 3 mil personas en Baja California, sin embargo, muchas no acuden a denunciar por temor a la represalias de la delincuencia y del propio gobierno.


“Queremos saber que posición tienen en torno a los desaparecidos, qué van a hacer, ayer aquí estuvieron cinco diputadas de Morena, y les mencioné esta necesidad, y la importancia que tiene que nos reciban”, informó.

Señaló que a pesar de que la Ley de Víctimas ya fue aprobada, no se ha echado andar, calificándola como letra muerta, ya que a las victimas no les han dado el trato y apoyo que precisa el precepto.

Explicó que en el acercamiento que han tenido con las victimas, han notado que muchos de los casos tuvieron que ver con el narcomenudeo, y el uso de las drogas, ya sea conflictos por la venta, una persona que bajo influjo de una sustancia desaparece a otra o victimas colaterales.

Madres excavadoras

“Todos tienen una mamá, seas ministerial, licenciado, delincuente o no, y esas mamás están buscando a sus hijos, ellas comenzaron a acercarse y a organizarse para hacer búsquedas en terrenos donde les dicen que podría haber cuerpos”, explicó Margarita Quiroz, asesora de la agrupación.

Son alrededor de 15 madres que desde el 2007 acuden con palas y herramientas a excavar en predios, parcelas o terrenos donde les avisa la comunidad que podría haber un cuerpo.

Desde hace 24 años que desapareció el hijo de Alma Díaz, no han encontrado solucionado un solo caso de desaparición de familiares de esta organización social, aseveró Quiroz.

Irma Leyva Soza, madre de Diego Hernández Leyva, desaparecido desde el 11 de enero del 2007, caso que no ha sido solucionado por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).

No cierran círculo

“Cuando se te muere un ser querido, cierras un círculo, pero cuando desaparece, no puedes cerrar nada, porque no sabes dónde quedó, lloramos al aire, no tenemos más que una fotografía, estoy en este momento como cuando empecé a buscarlo, porque no tengo nada”, concluyó la señora Leyva.

La psicóloga voluntaria de la organización, Silvia Margarita Hernández, comentó que es importante comprender el proceso por el que pasan los familiares de desaparecidos, ya que en casos extremos pueden llegar a tener pensamientos suicidas.

Una familia con un desaparecido, enfrenta un duelo ambiguo, ya que no tiene una tumba para visitar, ni realizó una ceremonia póstuma de despedida, por lo que la fase de aceptación de la pérdida no suele llegar.

Existe la duda de si estará vivo o muerto, cuando pasa mucho tiempo, el dolor se puede lograr una aceptación, pero las crisis de ansiedad o depresión se pueden reavivar en fechas como su cumpleaños, su desaparición, navidad”, ejemplificó.


“Pasan hasta 20 años y sigue siendo el mismo dolor, serviría que las autoridades solucionaran los casos, serviría para la salud emocional de las victimas, ya que este desgaste provoca incluso la desintegración familia”, señaló la experta en psicología.

En muchos de los casos recae sobre la madre el esfuerzo de seguir buscando y tramitando los procesos con las autoridades, por ello es de suma importancia pedir ayuda psicológica.

Una de los errores más comunes entre las personas que rodean a un familiar de un desaparecido, es procurar no tocar el tema, no obstante, es necesario que el familiar pueda desahogar sus pesares y sentir empatía por quien lo escucha, ya sean amigos, familia o servidores públicos, concluyó.

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