Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Lo Curioso / Viral

Perturbadora ilusión óptica se hace viral

En este caso hay una explicación científica. Te contamos lo que dicen los especialistas.

Perturbadora ilusión óptica se hace viral

Un estudio muestra que esta ilusión de "agujero en expansión", es bastante fuerte como para engañar a nuestros reflejos, es percibida por el 86% de las personas.

El doctor Bruno Laeng, profesor del Departamento de Psicología de la Universidad de Oslo y primer autor del estudio, dijo:

"El 'agujero en expansión' es una ilusión altamente dinámica: la mancha circular o gradiente de sombra del agujero negro central evoca una marcada impresión de flujo óptico, como si el observador se dirigiera hacia un agujero o túnel".

Te puede interesar: Una ilusión óptica que desaparecerá frente a tus ojos

Los investigadores en el campo de la psicosociología estudian las ilusiones ópticas para comprender los procesos complejos que utiliza nuestro sistema visual para anticipar y dar sentido al mundo visual, de una manera más indirecta que un dispositivo fotómetro que simplemente registra la cantidad de energía fotónica.

En el nuevo estudio, publicado en Frontiers in Human Neuroscience, Laeng y sus colegas muestran que la ilusión del "agujero en expansión" es tan buena para engañar a nuestro cerebro que genera un reflejo de dilatación de las pupilas para dejar entrar mayor cantidad de luz, tal como sucedería si en realidad nos estuviéramos moviendo hacia una zona oscura.

El reflejo de la pupila depende de la percepción, no necesariamente de la realidad.

"Aquí mostramos, basándonos en la nueva ilusión del 'agujero en expansión', que la pupila reacciona a cómo percibimos la luz, incluso si esta 'luz' es imaginaria como en la ilusión, y no solo a la cantidad de energía luminosa que realmente ingresa al ojo. La ilusión del agujero en expansión provoca una dilatación correspondiente de la pupila, como sucedería si la oscuridad realmente aumentara", comentó Laeng.

Laeng y sus compañeros exploraron cómo el color del agujero (además del negro: azul, cian, verde, magenta, rojo, amarillo o blanco) y de los puntos que lo rodean afectan la fuerza con la que reaccionamos mental y fisiológicamente a la ilusión. En una pantalla, presentaron variaciones de la imagen del "agujero en expansión" a 50 mujeres y hombres con visión normal, y les pidieron que calificaran subjetivamente con qué intensidad percibían la ilusión, indica DPA.

Mientras los participantes observaban la imagen, los investigadores midieron sus movimientos oculares y las constricciones y dilataciones inconscientes de sus pupilas. Como controles, a los participantes se les mostraron versiones "revueltas" de la imagen del agujero en expansión, con la misma luminancia y colores, pero sin ningún patrón.

La ilusión al aprecer era más efectiva cuando el agujero era color negro. Un 14% de los participantes no percibió ninguna expansión ilusoria cuando el agujero era negro, mientras que el 20% no lo hizo si el agujero era de color. Entre aquellos que percibieron una expansión, la fuerza subjetiva de la ilusión difería bastante.

Además encontraron que los agujeros negros promovieron fuertes dilataciones reflejas de las pupilas en los participantes, mientras que los agujeros de colores provocaron que sus pupilas se contrajeran. Para los agujeros negros, pero no para los agujeros de colores, cuanto más fuertes calificaban subjetivamente los participantes individuales su percepción de la ilusión, más tendía a cambiar el diámetro de su pupila, indica Milenio.

Los expertos todavía no saben por qué una minoría parece no ser susceptible a la ilusión del "agujero en expansión". Desconocen también si otras especies de vertebrados, o incluso animales no vertebrados con ojos de cámara como los pulpos, podrían captar la misma ilusión que nosotros.

"Nuestros resultados muestran que el reflejo de dilatación o contracción de las pupilas no es un mecanismo de circuito cerrado, como una fotocélula que abre una puerta, impermeable a cualquier otra información que no sea la cantidad real de luz que estimula el fotorreceptor. Más bien, el ojo se ajusta a lo percibido e incluso luz imaginada, no simplemente a la energía física. Los estudios futuros podrían revelar otros tipos de cambios fisiológicos o corporales que pueden 'arrojar luz' sobre cómo funcionan las ilusiones", finalizó Laeng.

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí

Temas relacionados