MÉXICO-. En vísperas de Navidad, un curioso e impactante caso ha captado la atención de usuarios en redes sociales: un joven tuvo que ser llevado en ambulancia y hospitalizado tras consumir cerca de 20 tamales de forma consecutiva.

En las imágenes virales se aprecia cómo los servicios médicos lo trasladan rápidamente para brindarle atención de urgencia, generando preocupación y debate sobre los riesgos de los excesos alimentarios durante las fiestas decembrinas.

Los excesos en comida y bebida suelen ser un común denominador en estas fechas, pero este caso ha puesto en primer plano la importancia de hablar de salud y límites, en lugar de normalizar dietas altas en grasa y carbohidratos sin reflexión alguna.

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¿Qué le sucede al cuerpo cuando se excede en navidad?

El organismo humano está diseñado para procesar cantidades moderadas de alimentos. Los tamales, tradicionales en muchas celebraciones, son ricos en grasas y carbohidratos, lo que puede ser problemático si se consumen en exceso.

Cuando se ingieren grandes cantidades de comida alta en calorías en poco tiempo, el estómago se expande más allá de su capacidad habitual, lo que causa malestar, hinchazón, acidez e incluso dolor abdominal, ya que el cuerpo dirige gran parte de su energía a la digestión intensiva. AARP

Este proceso puede desencadenar además picos de glucosa en sangre debido a la rápida absorción de carbohidratos, lo que obliga al páncreas a liberar insulina de manera acelerada para transportar esa glucosa a las células.

Si estas subidas y bajadas de azúcar se repiten con frecuencia (común en dietas altas en carbohidratos refinados), puede aumentar el riesgo de resistencia a la insulina y diabetes tipo 2 a largo plazo. AARP

El consumo excesivo de grasas saturadas, como las presentes en muchas recetas tradicionales y alimentos festivos, también está asociado con un mayor riesgo de hipertensión, obesidad y enfermedades cardíacas cuando se vuelve habitual. Ministerio de Salud

Además, comer en exceso no solo tiene efectos físicos: puede afectar el bienestar emocional, provocar fatiga intensa después de las comidas y fomentar patrones poco saludables que se repiten con el tiempo. AARP

Este caso, aunque viral por su carácter insólito, sirve como recordatorio sobre la importancia de la moderación alimentaria y de estar atentos a las señales de nuestro cuerpo. Las celebraciones son momentos de disfrute, pero también una oportunidad para reflexionar sobre hábitos que impactan nuestra salud mucho más allá de una sola festividad.