Por qué la tos empeora en invierno y cómo tratarla de forma segura

CIUDAD DE MÉXICO.- En la temporada invernal, la tos y el dolor de garganta se vuelven molestias frecuentes. Las bajas temperaturas, el aumento de infecciones respiratorias y el uso de calefacción en espacios cerrados favorecen la resequedad del aire y la irritación de las vías respiratorias. Aunque la tos es un reflejo natural de defensa del organismo, cuando se prolonga puede afectar el descanso y las actividades diarias.

Especialistas de Cleveland Clinic, encabezados por la neumóloga Rose Paccione, explican que antes de recurrir a remedios caseros o medicamentos es importante identificar la causa del síntoma.

La tos no es una enfermedad, es un síntoma

La Dra. Rose Paccione subraya que la tos no debe tratarse de forma aislada. “La mejor manera de tratar la tos es hacer foco en la causa. Usar un tratamiento inadecuado no funcionará y podría ser perjudicial”, afirmó a Cleveland Clinic.

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Por esta razón, el primer paso siempre es entender qué está provocando la tos, sobre todo cuando dura varios días o no mejora con medidas básicas.

Principales causas de tos durante el invierno

Las infecciones virales son la causa más común en esta época del año. El resfriado común, la gripe y el virus respiratorio sincitial (VRS) pueden provocar tos persistente que se extiende entre dos y tres semanas, incluso después de que otros síntomas desaparecen.

El asma también puede manifestarse con mayor frecuencia en invierno. En algunas personas, el único signo es una tos seca, sin silbidos ni dificultad para respirar. Las alergias ambientales, como las relacionadas con polvo o ácaros, pueden intensificarse al pasar más tiempo en interiores, generando goteo posnasal y tos.

Otra causa frecuente es la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE). Durante el invierno, las cenas abundantes y el hábito de acostarse poco después de comer pueden agravar el reflujo ácido, que irrita las vías respiratorias, sobre todo por la noche. Además, algunos medicamentos, como los inhibidores de la ECA y los betabloqueantes, pueden causar tos como efecto secundario, incluso tras años de uso.

Qué ayuda a aliviar la tos leve en casa

Una vez identificada la causa, existen medidas simples que pueden aliviar la tos leve. Las pastillas para la tos con mentol ofrecen alivio temporal, pero deben usarse con moderación. “No tome más de lo que recomienda el paquete: por lo general, no más de una pastilla para la tos cada dos horas”, indicó la Dra. Paccione a Cleveland Clinic.

El jengibre es otra opción útil, sobre todo en casos asociados a resfriados o alergias. Consumirlo en té o añadirlo a caldos calientes ayuda a disminuir la irritación de garganta.

Humedad y calor: claves en ambientes cerrados

Durante el invierno, la calefacción reseca el aire de interiores, lo que puede empeorar la tos. El uso de humidificadores o el vapor de una ducha caliente puede ayudar a mantener húmedas las vías respiratorias. “Un humidificador ayuda a calmar las vías respiratorias y a disolver la mucosidad”, explicó la especialista a Cleveland Clinic.

Estas medidas son especialmente útiles por la noche, cuando la tos suele intensificarse.

Medicamentos de venta libre: uso responsable

Entre los medicamentos sin receta más comunes se encuentran el dextrometorfano, que reduce el reflejo de la tos, y la guaifenesina, que ayuda a fluidificar la mucosidad para facilitar su eliminación.

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La Dra. Paccione destacó que, en el caso de la guaifenesina, es indispensable mantener una buena hidratación para potenciar su efecto. También advirtió que estos fármacos no deben administrarse a niños sin indicación médica.

Miel, agua y descanso adecuado

La miel ha demostrado ser tan eficaz como algunos medicamentos de venta libre para la tos leve en adultos. “Pruebe una cucharada de miel antes de acostarse para calmar la tos”, recomendó la especialista. Puede tomarse sola o disuelta en té o agua caliente. No debe administrarse a bebés menores de un año.

La hidratación sigue siendo fundamental, incluso en invierno. “Cuando esté enfermo, beba mucha agua para eliminar la mucosidad y ayudar a su cuerpo a recuperarse. A veces, un vaso de agua es suficiente para aliviar la tos con cosquilleo”, explicó la Dra. Paccione.

Dormir mejor para reducir la tos nocturna

La postura al dormir influye en la tos, sobre todo durante la noche. Elevar ligeramente la cabeza con una almohada en forma de cuña ayuda a evitar la acumulación de mucosidad y reduce el reflujo ácido. “Levantar ligeramente la cabeza puede prevenir ambos problemas”, afirmó la especialista a Cleveland Clinic.

Cuando la tos requiere atención médica

En personas con asma o ERGE, una tos persistente puede indicar que la enfermedad no está bien controlada. “Las pastillas para la tos y la miel no sirven en estos casos”, advirtió la Dra. Rose Paccione. En estas situaciones, es necesario ajustar el tratamiento con un profesional de la salud.

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Se recomienda consultar al médico si aparece sangrado al toser, dificultad para respirar, fiebre mayor a 38 °C por más de dos días, tos que dura más de tres semanas o sonidos extraños al toser, como la tos perruna. Aunque la mayoría de las toses invernales se resuelven solas, la valoración médica oportuna permite recibir el tratamiento adecuado y recuperar el bienestar respiratorio.