Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Lo Curioso / Segunda mano

Regalar de segunda mano: por qué más personas lo eligen y qué dice la ciencia del consumo

Regalar productos de segunda mano ya no es una decisión improvisada.

Regalar de segunda mano: por qué más personas lo eligen y qué dice la ciencia del consumo

CIUDAD DE MÉXICO.- Cada Navidad, cumpleaños o fecha especial aparece la misma duda: qué regalar sin gastar de más y sin sumar otro objeto innecesario. Un estudio publicado en la European Journal of Marketing analizó esta pregunta desde un ángulo poco común: por qué algunas personas deciden regalar productos de segunda mano y si esa intención realmente se concreta en una compra. Los resultados ayudan a entender un cambio silencioso en la forma de consumir y de regalar.

¿Regalar usado es una decisión improvisada?

Durante años se pensó que los regalos de segunda mano surgían por urgencia o falta de opciones. La investigación muestra lo contrario. En la mayoría de los casos, regalar usado es una decisión pensada que sigue el mismo proceso que cualquier otro regalo: reflexionar, elegir y comprar.

El estudio se basó en encuestas realizadas antes y después de Navidad. Esto permitió comparar lo que las personas decían que harían con lo que efectivamente hicieron. Así, se evitó quedarse solo en las buenas intenciones. No es lo mismo decir “yo regalaría algo usado” que hacerlo cuando llega la fecha.

El resultado fue claro: quienes planeaban regalar productos de segunda mano, en muchos casos lo hicieron. Aquí, la distancia entre lo que se piensa y lo que se hace es menor que en otros hábitos de consumo responsable.

El precio justo, la razón principal para elegir regalos usados

Cuando se pregunta por qué alguien regala de segunda mano, la respuesta más fuerte no es ecológica ni moral. El principal motor es la percepción de pagar un “precio justo” por un objeto que aún tiene valor.

Para muchas personas, pagar más solo porque algo es nuevo no siempre tiene sentido, sobre todo si el producto funciona bien o está en buen estado. Regalar usado permite ajustar el gasto sin renunciar a utilidad. No se trata solo de gastar menos, sino de gastar con sentido.

El estudio también muestra que no pesa tanto la emoción de encontrar una ganga. Lo que importa más es el equilibrio entre lo que se paga y lo que se entrega. El valor percibido está por encima del descuento.

Buscar, encontrar y actuar de forma coherente

Además del precio, hay otro factor clave: la experiencia de búsqueda. Explorar mercados de segunda mano, físicos o en línea, puede convertirse en parte del valor del regalo. Encontrar un objeto específico o con historia añade sentido a la elección.

A esto se suman las razones éticas y ambientales. Evitar el desperdicio, extender la vida útil de los productos y reducir el impacto ambiental influyen en la decisión. Sin embargo, el estudio señala que estas razones suelen reforzar la compra, más que iniciarla.

En otras palabras, quien ya procura consumir de forma responsable encuentra en el regalo usado una opción coherente con sus valores. Regalar de segunda mano permite alinear lo que se piensa con lo que se hace.

De la intención a la compra: por qué aquí sí se cumple

En muchos ámbitos del consumo responsable existe una brecha entre intención y acción. En el caso de los regalos de segunda mano, esa brecha es más corta. La intención suele convertirse en compra real.

Una explicación es que regalar implica planificación. Hay una fecha, una persona y una necesidad concreta. Esto reduce la improvisación y empuja a cerrar la decisión. El regalo obliga a pasar del discurso a los hechos.

El estudio también detectó diferencias según el tipo de producto. Artículos fáciles de evaluar, como libros o electrónicos, se compran usados con mayor confianza. En cambio, ropa o muebles generan más dudas porque requieren una revisión más detallada. Cuanto más sencillo es evaluar el estado del objeto, más fluido es el proceso.

Valores ambientales y un cambio cultural en marcha

Las personas con valores ambientales más fuertes no solo eligen con más frecuencia regalos de segunda mano, sino que también concretan la compra con mayor decisión. En estos casos, los valores ecológicos no crean la idea, pero sí la aceleran.

Este comportamiento refleja un cambio cultural más amplio. Regalar algo usado ya no se percibe necesariamente como un gesto negativo. Para muchos, es una opción válida y, en ciertos contextos, deseable.

El estudio sugiere que esta tendencia puede crecer si las plataformas y comercios facilitan la compra de regalos de segunda mano, sobre todo en fechas clave. Cuando comprar usado es sencillo y claro, más personas se animan a hacerlo.

También podría interesarte:

En un contexto donde el gasto y el impacto ambiental preocupan cada vez más, el regalo de segunda mano deja de ser una excepción y se convierte en una alternativa práctica, pensada y coherente para quien busca regalar con sentido.

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí

Temas relacionados

HISTORIAS