Tu teléfono y tu computadora podrían aumentar tu riesgo de cáncer, enfermedades del corazón y obesidad, aquí te explicamos cómo

CIUDAD DE MÉXICO.- Mirar una pantalla por la noche no solo afecta su descanso. La evidencia científica muestra que este hábito puede cambiar procesos clave de su cuerpo. La luz azul que emiten los celulares, computadoras y tabletas mantiene la atención durante el día, pero por la noche interfiere con el ritmo circadiano, el ciclo natural de 24 horas que regula el sueño, la producción hormonal y varias funciones internas.

Este ritmo controla cuándo se libera melatonina y cortisol. Cuando la luz azul lo altera, la producción de melatonina baja y el cuerpo pierde señales importantes para dormir de forma adecuada. Esto afecta el descanso nocturno y abre la puerta a complicaciones que van más allá del cansancio.

Impacto en el sueño, el metabolismo y la respuesta a la insulina

Dormir mal tiene efectos directos en cómo el cuerpo maneja la glucosa. Las investigaciones muestran que una alteración del ritmo circadiano puede volver menos eficiente la respuesta del organismo a la insulina. Esto aumenta el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.

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Una investigación incluso encontró que las personas expuestas a más luz azul por la noche tenían “un 50% más de posibilidad de desarrollar diabetes”. A esto se suma que la luz azul nocturna favorece el aumento de peso, un factor que también influye en el riesgo de resistencia a la insulina.

El vínculo entre pantallas, sueño y metabolismo es claro: menos descanso reparador implica más alteraciones en procesos que controlan energía, hambre, glucosa y peso corporal.

Efectos en la salud del corazón y la presión arterial

El reloj interno también influye todos los días en la presión arterial y la frecuencia cardiaca. Cuando este sistema se altera, la regulación del corazón se vuelve irregular. Esto puede dar lugar a presión alta, ritmo cardiaco elevado, insuficiencia cardiaca o un mayor riesgo de enfermedad cardiaca.

Estas variaciones no siempre son visibles de inmediato. Sin embargo, se acumulan con el paso del tiempo, especialmente si la exposición nocturna a pantallas es constante. Reducir el uso de dispositivos antes de dormir podría ayudar a mantener un funcionamiento más estable del sistema cardiovascular.

Riesgo de cáncer: por qué la luz del celular puede influir

La alteración del ciclo del sueño también está relacionada con ciertos tipos de cáncer. Un estudio que analizó la exposición a longitudes de onda de luz azul encontró que quienes dormían con pantallas encendidas tenían “1.5 veces más riesgo de desarrollar cáncer de mama” y “el doble de riesgo de desarrollar cáncer de próstata”.

Estos efectos pueden explicarse por la disminución de la melatonina, una hormona que se activa en la oscuridad. Algunos estudios sugieren que la melatonina podría tener propiedades anticancerígenas y que sus niveles bajos pueden aumentar la formación de tumores.

Harvard también encontró que 6.5 horas de exposición a luz azul movieron el ritmo circadiano “el doble que la exposición a luz verde”, lo que muestra la potencia de este tipo de iluminación.

Qué puede hacer desde hoy para proteger su salud

Reducir la exposición nocturna a pantallas puede ser un cambio pequeño con beneficios importantes. Algunas acciones prácticas incluyen:

• Evitar celulares y computadoras al menos una hora antes de dormir.
• Activar el modo nocturno o filtro de luz cálida en dispositivos.
• Mantener el dormitorio completamente oscuro durante la noche.
• Bajar el brillo de la pantalla si su uso es indispensable.
• Usar lámparas cálidas en lugar de luces blancas o frías.

Estos ajustes ayudan a su cuerpo a mantener un ritmo natural más estable y reducen el impacto de la luz azul en el sueño, el metabolismo, el corazón y el riesgo de enfermedades.

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Un hábito sencillo, un impacto real

La luz azul es parte de la vida diaria, pero comprender su efecto permite tomar decisiones más informadas. La evidencia científica coincide en que disminuir su uso por la noche puede mejorar su sueño y, con ello, proteger funciones vitales de su organismo. Evitar las pantallas antes de dormir no solo trata de descansar mejor, sino de cuidar la salud a largo plazo.