‘Ese perrito tenía pase VIP, qué bello’: cantante detiene su concierto para no afectar a un lomito en el público
Más allá del gesto, la acción de Taty Girl abrió conversación sobre la necesidad de reducir el uso de pirotecnia en eventos masivos
MÉXICO-. La sensibilidad de la cantante brasileña Taty Girl se volvió viral luego de que, en pleno concierto, tomara una decisión inesperada: suspender el espectáculo de pirotecnia que tenía preparado al notar la presencia de un perro sin hogar que observaba el show desde la primera fila.
El momento quedó registrado en video y rápidamente recorrió redes sociales, sumando más de 592 mil reacciones y miles de comentarios que aplauden el gesto de la artista.
“Caramelo” el fan más especial
Mientras interpretaba una de sus canciones, Taty notó cómo un perrito se había acercado casi hasta el escenario, observándola como si fuera otro fan más.
Con ternura, la cantante decidió bautizarlo como “Caramelo”, y desde ese instante lo convirtió en parte central de su presentación.
La intérprete tomó el micrófono y, frente al público, anunció: “No lanzaremos más fuegos artificiales, a Caramelo no le gustan. Por respeto a él, no los usaremos. Ustedes pueden ver que está allí callado, disfrutando el show”.
El público estalló en aplausos, conmovido por la empatía de la artista, y muchos asistentes comenzaron a corear que debía adoptar al perrito.
Según reportaron medios locales, Taty escuchó a sus fans y decidió llevarse a Caramelo a casa, asegurándole un futuro lleno de amor y cuidados.
Una ola de reacciones en redes
El video del momento rápidamente se difundió en plataformas como Instagram y TikTok, donde los usuarios expresaron su admiración por la cantante.
Entre los comentarios se podían leer frases como: “Ya lo adoptó, hace poco salió la noticia”, “Ese perrito tenía pase VIP, qué bello” y “Pero miren cómo la mira, qué precioso”.
Más allá del gesto, la acción de Taty Girl abrió conversación sobre la necesidad de reducir el uso de pirotecnia en eventos masivos, no solo por los animales que sufren con el ruido, sino también por personas vulnerables, como niños pequeños y adultos mayores.
Un gesto que inspira
La historia de Taty Girl y Caramelo ha sido recibida como un ejemplo de empatía y conciencia en el mundo del espectáculo.
Lo que comenzó como un detalle inesperado en un concierto terminó convirtiéndose en un acto de protección hacia un ser indefenso, recordando que la música no solo une personas, también puede dar voz a quienes no la tienen.