¿Guardar el perfume en el congelador realmente prolonga su duración?

CIUDAD DE MÉXICO.- En redes sociales circulan muchos “hacks” o trucos sobre perfumes, y uno de los más populares es guardar las fragancias en la heladera para que duren más. Sin embargo, esta práctica, aunque parezca lógica, no siempre es recomendable. Es importante entender cómo cuidar un perfume para que conserve su aroma y evitar caer en mitos que puedan afectar su calidad.

¿Guardar el perfume en la heladera realmente prolonga su duración?

Un perfume es una mezcla delicada de aceites esenciales, alcohol y compuestos aromáticos, que le dan su aroma característico. Según el blog de Fraiche México, exponer esta mezcla a bajas temperaturas, como las de una heladera, puede descomponer el equilibrio químico que hace único al perfume. Esto puede provocar cambios en el aroma, haciendo que predominen notas alcohólicas o que el perfume pierda intensidad.

Además, la marca española Esenzzia Perfumes advierte que el frío puede alterar la fórmula, afectando tanto su olor como su estabilidad. No obstante, si solo se guardó en el refrigerador por unos días, no hay que alarmarse, aunque sí se recomienda observar si el aroma cambia para evitar usar un producto alterado.

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Recomendaciones para conservar el aroma de los perfumes

No todos los perfumes reaccionan igual ante las variaciones de temperatura. Los expertos de The Fragrance Foundation explican que las fragancias de alta gama, que contienen compuestos más delicados, son especialmente sensibles a cambios térmicos, por lo que deben mantenerse alejadas de ambientes muy fríos o muy cálidos.

Por ello, especialistas de Lancôme Australia y Maison de L’Asie sugieren que la mejor manera de conservar un perfume es almacenarlo en un lugar fresco, seco y oscuro. Estas condiciones ayudan a mantener la estabilidad de los ingredientes y a preservar su aroma original por más tiempo.

Además de elegir un lugar adecuado, se recomienda evitar exponer el perfume a la luz directa del sol, al calor excesivo y a cambios bruscos de temperatura. Así, se logra que la fragancia no pierda sus notas y se pueda aprovechar al máximo sin desperdiciar ni una gota.

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En resumen, aunque la idea de guardar el perfume en la heladera pueda parecer útil, lo cierto es que esta práctica puede ser contraproducente y alterar la composición química de la fragancia. Los especialistas coinciden en que el almacenamiento correcto es la clave para prolongar la vida útil del perfume. Por eso, es mejor optar por un espacio con temperatura estable, sin humedad ni luz directa, para que cada aplicación siga siendo tan placentera como la primera vez.