El vinagre: el truco casero que mejora la cocción de las lentejas

CIUDAD DE MÉXICO.- Durante generaciones, los trucos de cocina han pasado de boca en boca, marcando la forma en que se preparan los platillos cotidianos. Algunos permanecen como clásicos, mientras que otros resurgen gracias al intercambio en redes sociales. Entre estos últimos destaca el uso del vinagre, un ingrediente habitual en la despensa, que está ganando popularidad por un uso menos conocido: mejorar la cocción de las lentejas.

Un viejo conocido con nuevos usos

Este ácido natural, comúnmente asociado con aderezos y limpieza del hogar, también tiene propiedades poco difundidas en la cocina diaria. Aunque suele estar vinculado con ensaladas bien sazonadas o soluciones caseras contra el sarro, ahora se sabe que su uso va más allá y puede transformar la preparación de ciertas legumbres.

Basta con añadir un pequeño chorro de vinagre al agua de cocción para notar una diferencia en el resultado final. En especial con las lentejas, este gesto simple está ayudando a lograr una mejor textura y una digestión más ligera, además de potenciar los nutrientes presentes en estos alimentos vegetales.

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Cuáles son los beneficios de comer lentejas

Textura mejorada y digestión más fácil

Las lentejas, protagonistas de muchas recetas saludables y nutritivas, ganan mucho cuando se les agrega vinagre durante la cocción. El truco consiste en añadirlo cuando el agua comienza a hervir. No es necesario medir con exactitud: con una pequeña cantidad es suficiente para notar los beneficios en textura y sabor, sin alterar negativamente el platillo.

Este método no solo mejora la consistencia, sino que también facilita la digestión. Uno de los problemas comunes al consumir legumbres es la producción de gases, algo que el vinagre ayuda a reducir gracias a su acción sobre los antinutrientes, compuestos que pueden interferir en la absorción de minerales importantes como hierro y calcio.

Además de sus efectos sobre las lentejas, este consejo también puede aplicarse a otras legumbres como los garbanzos y los porotos. Incluso alimentos como el arroz, las papas o los huevos duros pueden beneficiarse del toque de vinagre durante la cocción, sin modificar su sabor de forma desagradable.

Un truco sencillo con grandes beneficios

La clave de este truco está en su sencillez. No requiere utensilios especiales ni ingredientes exóticos. Solo vinagre, del que probablemente ya se tiene en casa. Al incorporarlo a la cocción, se obtienen preparaciones más suaves, digestivas y ricas en nutrientes, ya que este producto también aporta antioxidantes y vitaminas.

Este tipo de consejos demuestran que muchas veces los mejores cambios en la cocina vienen de los detalles más simples. Con tan solo un chorrito de vinagre, es posible transformar por completo un platillo básico y convertirlo en una opción más saludable y agradable.

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En resumen, el vinagre no es solo un condimento o producto de limpieza. También puede ser un aliado culinario versátil que, aplicado correctamente, ayuda a mejorar la experiencia de cocinar y comer legumbres. Un truco fácil, económico y efectivo que vale la pena probar.