Cómo saber si hay una fuga de gas en casa: técnica fácil

Desde pequeños absorbemos conocimientos fundamentales en casa: cómo comunicarnos, distinguir entre lo correcto e incorrecto, identificar riesgos al manipular ciertos objetos, resolver conflictos y cuidar de nuestra higiene. Aunque no lo notemos, todos estos aprendizajes se quedan con nosotros y, con el tiempo, los adaptamos a nuevas situaciones.

Uno de esos conocimientos útiles, aunque no siempre lo aprendemos desde niños, es cómo detectar fugas, especialmente de gas o de agua en el hogar. Y es que las casas cambian, los sistemas también, y lo que funcionaba en el baño de la casa donde creciste puede no aplicar del todo en tu nuevo departamento. Aun así, existen técnicas muy prácticas que siguen siendo vigentes, como la del jabón para localizar escapes de gas.

¿Por qué el jabón ayuda a encontrar fugas de gas?

Si nunca has estado presente cuando alguien revisa una posible fuga, esta información puede serte muy útil. La primera señal de una fuga de gas suele ser el olor: una mezcla fuerte y desagradable, parecida al del huevo podrido, que muchas veces se asocia de inmediato al gas doméstico. Si detectas ese aroma cerca de una estufa, calentador o tanque, es momento de actuar.

Debido a su peligrosidad —el gas es inflamable y puede desplazar el oxígeno del ambiente— se deben tomar precauciones al momento de revisarlo. Una técnica sencilla y efectiva es la prueba del jabón. Solo necesitas un poco de agua, unas cucharadas de jabón para trastes y una esponja.

Según expertos, se debe preparar esta mezcla en un recipiente y aplicarla con la esponja sobre las conexiones o zonas donde sospeches que podría haber una fuga. Es fundamental que en ese momento la válvula del gas esté cerrada para trabajar con seguridad, indica Xataka.

¿Qué ocurre al aplicar el jabón?

La razón por la cual esta mezcla funciona es que el jabón reduce la tensión superficial del agua, lo que facilita la formación de burbujas. Si existe una fuga, el gas escapará por el punto dañado y hará que aparezcan burbujas justo en esa zona.

Una vez aplicada la solución, abre con cuidado la válvula del gas o deja entrar aire a presión si es un sistema distinto. Si comienzas a ver burbujas en algún punto, has encontrado la fuga. Esta técnica también sirve para detectar escapes en otros objetos, como llantas, mangueras, válvulas o cualquier componente que almacene aire o gas bajo presión.

Empresas especializadas en plomería, recomiendan aplicar el jabón especialmente en las áreas donde el olor es más intenso o incluso cubrir toda la tubería o manguera para asegurarse de no pasar por alto ningún escape.