La pantalla de tu celular podría avisarte cuándo tomar agua, según científicos

CIUDAD DE MÉXICO.- La deshidratación no siempre avisa. Muchas veces, cuando sentimos sed, ya hemos perdido agua suficiente como para afectar funciones clave del cuerpo. Esta situación puede ser aún más crítica durante el ejercicio físico intenso o en periodos de ayuno prolongado, como ocurre en el Ramadán. Pero ahora, un equipo de científicos propone una solución simple y accesible: que nuestro teléfono nos avise a tiempo, solo con tocar la pantalla.

Tocar la pantalla para saber si necesitas agua

Esa es la propuesta de investigadores del King Abdullah University of Science and Technology (KAUST), en Arabia Saudita, quienes diseñaron un sistema que mide el nivel de hidratación usando sensores capacitivos, como los que ya tienen muchos celulares. El estudio, publicado en mayo de 2025 en el IEEE Sensors Journal, mostró cómo una pequeña variación en la respuesta eléctrica de la piel puede indicar cuánta agua hemos perdido.

El dispositivo funciona sin agujas, sin dispositivos externos y sin molestias. A través del simple contacto del dedo con una pantalla, se analiza la capacitancia de la piel —una propiedad que cambia según la cantidad de agua en el cuerpo—, y estos datos se interpretan con ayuda de modelos de inteligencia artificial.

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Pruebas con ayunantes y atletas

Para validar su propuesta, los investigadores aplicaron pruebas a dos grupos vulnerables a la deshidratación: personas que ayunaban durante el Ramadán y deportistas después del ejercicio. En total, participaron 35 personas en ayuno y 10 atletas, cuyos niveles de hidratación fueron monitoreados en distintos momentos del día o del entrenamiento.

Las personas en ayuno fueron evaluadas cinco veces al día, desde la mañana hasta el atardecer, mientras que los atletas fueron analizados antes y después del esfuerzo físico. La medición principal fue la capacitancia dérmica, pero también se incluyeron variables como sexo y peso, lo que ayudó a adaptar los resultados a cada individuo.

Los patrones observados fueron distintos en cada grupo: en los ayunantes, la deshidratación fue más progresiva; en los atletas, más brusca y variable. Esta diferencia permitió entrenar modelos específicos para cada situación, lo que podría ser útil en el desarrollo de aplicaciones personalizadas.

Inteligencia artificial y precisión clínica

Los datos recopilados se procesaron con modelos de clasificación capaces de distinguir entre distintos niveles de hidratación, desde un simple “hidratado o no” hasta escalas de cinco niveles. El modelo más exitoso fue el de regresión logística lineal, que alcanzó un 92 % de precisión en atletas y un 87 % en personas en ayuno.

Estas cifras indican que la tecnología podría competir con métodos tradicionales mucho más invasivos o costosos. Además, los investigadores usaron técnicas avanzadas de adaptación entre dominios (domain adaptation) para mejorar el rendimiento de los modelos según el tipo de usuario o situación.

Gracias a estas técnicas, la herramienta podría adaptarse a otros grupos vulnerables, como adultos mayores, niños o personas con enfermedades renales, para quienes la hidratación es especialmente importante.

Tecnología accesible sin dispositivos adicionales

Una de las ventajas más destacadas del sistema es su facilidad de uso: basta con poner el dedo en la pantalla del celular. Esto elimina la necesidad de equipos especializados, extracciones de sangre o sensores que deben adherirse al cuerpo, lo cual podría democratizar el acceso al monitoreo de salud.

Además, como los sensores capacitivos ya vienen en la mayoría de los teléfonos actuales, esta innovación no requiere la fabricación de nuevo hardware. Esto facilitaría su implementación en diferentes contextos, desde comunidades con difícil acceso a servicios médicos hasta entornos laborales exigentes.

La meta a futuro es integrar esta tecnología en aplicaciones móviles que emitan alertas personalizadas sobre el estado de hidratación del usuario, promoviendo hábitos saludables sin requerir supervisión médica constante.

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Implicaciones para la salud pública y el autocuidado

Más allá de la comodidad, esta innovación tiene aplicaciones clínicas concretas. Detectar la deshidratación de forma temprana podría ayudar a prevenir problemas renales, cardiovasculares o cognitivos. En adultos mayores, por ejemplo, la falta de sed no siempre refleja el verdadero estado de hidratación del cuerpo.

También podría aplicarse al monitoreo de pacientes que toman medicamentos diuréticos o que se están recuperando de enfermedades gastrointestinales. En el ámbito deportivo, la herramienta podría prevenir lesiones o caídas relacionadas con la fatiga por deshidratación.

“Visualizamos un monitoreo diario y en tiempo real, donde los usuarios simplemente colocan el dedo en la pantalla del móvil”, explicó Soumia Siyoucef, una de las autoras del estudio. Esta posibilidad, antes impensable, se acerca cada vez más a la realidad.

Una gota digital en el océano del autocuidado

Este desarrollo se alinea con una tendencia creciente: el uso de tecnología cotidiana para el cuidado de la salud personal. Convertir un teléfono móvil en un sensor de hidratación representa un paso más hacia una medicina preventiva, personalizada y no invasiva.

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Aunque no reemplaza a la consulta médica, sí puede ayudar a mantener el cuerpo en equilibrio con solo un gesto. En un futuro cercano, saber si necesitas tomar agua podría ser tan fácil como desbloquear el teléfono. Y en tiempos donde la prevención es clave, esa simple notificación podría marcar la diferencia entre el bienestar y una complicación de salud.