Estos son los trabajos más deprimentes en Estados Unidos, según un nuevo estudio
Un estudio en Estados Unidos reveló que trabajadores de sectores como servicios sociales, alimentos, salud y educación presentan mayores tasas de depresión.
CIUDAD DE MÉXICO.- Una nueva investigación realizada en Estados Unidos reveló que ciertos sectores laborales están vinculados con mayores tasas de depresión y angustia emocional frecuente entre los trabajadores. El estudio, que analizó datos de encuestas realizadas a más de medio millón de empleados entre 2015 y 2019, identificó que más de 80 mil personas reportaron haber sido diagnosticadas con depresión al menos una vez en su vida.
Depresión y trabajo: algunos sectores laborales afectan más la salud mental
Entre los hallazgos más relevantes, se observó que las mujeres fueron diagnosticadas con el doble de frecuencia que los hombres. Además, algunos sectores destacaron por los niveles particularmente altos de malestar emocional, como los servicios comunitarios y sociales, la preparación de alimentos, las artes, los medios de comunicación y el deporte, seguidos por trabajadores de la salud, el comercio minorista, la educación y las bibliotecas.
Los investigadores consideran que estas cifras deben tomarse como una advertencia para los empleadores, quienes deberían reevaluar cómo están diseñados los programas de salud mental en sus empresas. Según los expertos, ofrecer beneficios genéricos no basta cuando hay sectores que requieren atención especializada.
Un problema más complejo de lo que parece
Aunque sectores como la minería y la construcción reportaron tasas más bajas de diagnósticos de depresión, eso no significa que sus trabajadores estén fuera de riesgo. De hecho, esas industrias tienen los índices de suicidio más altos entre los adultos estadounidenses, y las cifras han ido en aumento desde el año 2000.
Este contraste llevó a los expertos a plantear que la menor cantidad de diagnósticos podría deberse a que los hombres —quienes dominan estos campos— suelen evitar buscar ayuda profesional por problemas de salud mental. Factores como el estigma, la falta de servicios disponibles o vivir en zonas remotas, podrían estar dificultando el acceso al tratamiento.
Dr. Manish Sapra, director ejecutivo de servicios de salud conductual en Northwell Health, calificó el estudio como “significativo” y señaló la necesidad urgente de adaptar los apoyos psicológicos según el entorno laboral. “No se trata de aplicar soluciones genéricas, sino de responder a las necesidades reales de cada población laboral”, expresó.
Propuestas para mejorar el apoyo emocional en el trabajo
Northwell Health, por ejemplo, ha desarrollado iniciativas específicas para apoyar a su personal médico, un grupo altamente expuesto a situaciones traumáticas. Entre estas acciones destacan redes de apoyo entre colegas, programas de primeros auxilios psicológicos y acceso digital a servicios de salud mental.
“Estamos ampliando el acceso a la atención mental para nuestros empleados, incluso a través de tecnología digital que les permite recibir ayuda con solo presionar un botón”, explicó Sapra. La meta es intervenir de manera oportuna, antes de que los problemas se agraven.
Para otros empleadores, el reto está en reducir barreras como el costo, la falta de tiempo y los prejuicios sociales. También es clave que los servicios estén disponibles en horarios compatibles con los turnos laborales, y que se ofrezcan opciones como la telemedicina para quienes no pueden desplazarse fácilmente. La salud mental en el trabajo ya no puede verse como un beneficio extra: debe ser una prioridad.