Fumar cigarrillos se relaciona con mayor prevalencia de discapacidad en adultos

CIUDAD DE MÉXICO.- Un estudio publicado el 29 de mayo en la revista Tobacco Control reveló que las personas adultas que fuman cigarrillos presentan una prevalencia de discapacidad más del doble en comparación con quienes nunca han fumado. Esta investigación fue realizada por Jeanette Novakovich, Ph.D., de la Oficina de Tabaquismo y Salud de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, junto con un equipo de colegas especializados en salud pública.

Mayor riesgo entre quienes fuman actualmente

El análisis se basó en datos recopilados entre 2019 y 2023 por la Encuesta Nacional de Entrevistas de Salud. Se evaluaron distintos tipos de dificultades funcionales —como discapacidades visuales, auditivas, motrices y cognitivas— en adultos fumadores, exfumadores y personas que nunca han fumado. Los resultados mostraron que 14.1 % de los fumadores actuales reportaron tener alguna discapacidad, frente al 12.6 % de exfumadores y apenas 6.8 % de quienes nunca han fumado.

En cifras generales, los fumadores actuales tienen entre 2.0 y 2.4 veces más probabilidades de presentar alguna discapacidad que quienes nunca han fumado. Este hallazgo plantea una conexión significativa entre el consumo continuo de tabaco y el deterioro en la capacidad funcional de las personas adultas.

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Mujeres, adultos mayores y no hispanos, más afectados

El estudio también identificó diferencias importantes según el sexo, la edad y el origen étnico. Entre quienes fuman actualmente, el 16.5 % de las mujeres reportaron discapacidad, en comparación con el 12.1 % de los hombres. Por grupos de edad, la prevalencia fue notablemente mayor en adultos mayores de 65 años (21.6 %) frente a los de 25 a 44 años (8.7 %).

En cuanto a raza y etnicidad, las personas no hispanas que fuman reportaron un 19.0 % de prevalencia de discapacidad, mientras que entre los fumadores hispanos esta cifra fue de 11.1 %. Estos datos sugieren que, además del tabaquismo, existen factores sociales y demográficos que influyen en la salud funcional de las personas.

Los autores destacaron que, de los aproximadamente 25 millones de adultos que fuman actualmente en Estados Unidos, alrededor del 40 % ha experimentado algún tipo de dificultad funcional. Esta cifra subraya el impacto silencioso pero significativo que el tabaquismo puede tener en la calidad de vida de quienes lo practican.

Implicaciones para la salud pública

Estos resultados aportan evidencia clave para reforzar las campañas de prevención del tabaquismo y el diseño de intervenciones más enfocadas en grupos vulnerables. Además, subrayan la necesidad de considerar el impacto del cigarro más allá de las enfermedades respiratorias o cardiovasculares, ya que también puede limitar la movilidad, la cognición y otros aspectos fundamentales del bienestar diario.

Aunque el estudio se enfocó en la población adulta de Estados Unidos, sus conclusiones pueden tener relevancia para otros países donde el tabaquismo sigue siendo un problema de salud pública. En este contexto, la información podría servir como una herramienta útil para diseñar políticas más efectivas en la reducción del consumo de tabaco.

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En definitiva, la investigación aporta una visión más amplia sobre los daños del tabaquismo, al evidenciar su relación directa con la discapacidad funcional. Para muchos, estos hallazgos podrían ser una razón más para dejar de fumar o evitar el inicio del hábito.