Las abejas pueden reconocer rostros humanos y lo hacen como nosotros

A pesar de tener cerebros del tamaño de una semilla de sésamo, las abejas poseen habilidades cognitivas sorprendentes. Una de las más insólitas fue revelada por un equipo de científicos de la Universidad de Queensland, Australia, quienes descubrieron que estos insectos pueden reconocer rostros humanos.

En el experimento, las abejas fueron entrenadas para identificar fotografías de rostros. Al presentarles varias imágenes, lograban distinguir correctamente el rostro asociado a una recompensa, como agua azucarada. Lo sorprendente es que su método es muy similar al de los humanos: reconocen patrones básicos como la disposición de ojos, nariz y boca.

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Este hallazgo fue más que una simple curiosidad: demostró que no se necesita un cerebro grande para realizar tareas complejas. Con apenas unas miles de neuronas, las abejas pueden aprender, recordar y resolver problemas visuales que antes se creían exclusivos de mamíferos.