Alarma por la cantidad de shampoo, lociones y jabones corporales femeninos que contienen este químico cancerígeno
Un nuevo estudio reveló que muchos productos de cuidado personal, como champús, cremas y jabones, contienen formaldehído o sustancias que lo liberan, un químico relacionado con el cáncer.
CIUDAD DE MÉXICO.- Un reciente estudio ha revelado que una gran cantidad de productos de cuidado personal contienen formaldehído, una sustancia conocida por su vínculo con el cáncer. Este químico, y otros conservadores que lo liberan, se utilizan comúnmente para alargar la vida útil de artículos como champús, cremas, jabones corporales e incluso pegamentos para pestañas.
Formaldehído, un riesgo silencioso en el baño
Aunque en años recientes el debate sobre el formaldehído se ha centrado principalmente en los alisadores capilares, la investigación demuestra que el problema va mucho más allá. El equipo liderado por la doctora Robin Dodson, del Silent Spring Institute, encontró que estos químicos están presentes en productos que las personas usan a diario y en distintas partes del cuerpo. “Las exposiciones repetidas pueden acumularse y causar daños importantes”, advirtió la especialista.
El estudio, publicado en Environmental Science & Technology Letters, pidió a mujeres negras y latinas que documentaran durante una semana los productos que usaban y compartieran fotos de las etiquetas. Los investigadores analizaron más de mil listas de ingredientes y hallaron que el 53% de las participantes usaban al menos un producto que incluía conservadores liberadores de formaldehído.
Exposición cotidiana sin advertencias claras
Uno de los principales hallazgos fue que muchos de estos productos se aplicaban de forma diaria o varias veces a la semana. El conservador más común fue el DMDM hidantoína, presente en cerca del 47% de los productos para el cuidado de la piel y el 58% de los artículos para el cabello analizados. Sin embargo, Dodson aclaró que la lista de sustancias que investigaron no es exhaustiva: “Podría haber más ingredientes que aún no identificamos”.
Una preocupación clave es que, aunque algunas personas evitan productos que contienen formaldehído, muchas no saben que hay ingredientes que lo liberan sin mencionarlo directamente. Estos compuestos suelen tener nombres técnicos complicados, lo que dificulta su identificación por parte de los consumidores comunes.
El estudio forma parte del proyecto Taking Stock, una colaboración entre Occidental College, Black Women for Wellness, Silent Spring y la Universidad de Columbia. La investigación busca entender cómo las sustancias químicas presentes en productos de belleza afectan de manera desproporcionada a mujeres negras y latinas en California, y cómo estas exposiciones contribuyen a desigualdades en salud.
Llamado a mejores regulaciones y alternativas seguras
Ante esta situación, las investigadoras hacen un llamado a mejorar la regulación de los ingredientes en los productos de cuidado personal. “No deberíamos tener que ser químicas para saber qué productos pueden enfermarnos”, declaró Janette Robinson Flint, directora de Black Women for Wellness. Dodson coincide en que la falta de claridad en las etiquetas representa un problema de salud pública.
Para apoyar a las consumidoras, Silent Spring ofrece consejos y herramientas como la aplicación Detox Me, que ayuda a identificar alternativas más seguras. La propuesta de las investigadoras es que, como en Europa, las empresas estén obligadas a advertir cuando sus productos contienen estos químicos. Aún mejor, dicen, sería prohibirlos por completo.
Al menos 10 estados en Estados Unidos y la Unión Europea ya han impulsado o implementado prohibiciones sobre el uso de formaldehído y sus derivados. En 2023, la FDA propuso una prohibición nacional para los alisadores capilares que contienen esta sustancia, pero la medida aún no se ha concretado. Mientras tanto, la recomendación principal es informarse y exigir mayor transparencia para proteger la salud desde el tocador.