Cómo quitar arrugas de la ropa sin plancha: trucos caseros fáciles

La infancia: ese glorioso momento en el que la ropa rota, manchada o arrugada no solo es aceptada, sino parte del uniforme oficial. Saltar charcos, trepar árboles o tirarse al suelo no requiere explicación. Pero llega un punto en la vida —sí, la adultez— en que ya no puedes salir a la calle como si acabaras de rodar por el pasto.

Con la edad, el vestir deja de ser solo una cuestión de cubrir el cuerpo: se convierte en una declaración. La ropa debe oler bien, estar limpia, sin agujeros y, para complicar aún más las cosas... libre de arrugas.

Aquí es donde se vuelve real el dilema moderno. Entre alquileres imposibles y espacios mínimos, muchos adultos sacrifican la plancha y la tabla de planchar como si fueran lujos del pasado. ¿El resultado? Prendas arrugadas y creatividad al límite.

¿Cómo enfrentarse a las arrugas sin plancha? Aquí algunas soluciones ingeniosas:

• Vapor express en el baño: Cuelga tu ropa dentro mientras te duchas con agua caliente. Asegúrate de cerrar bien puertas y ventanas para que el vapor haga su magia sobre las fibras textiles.
• Secadora aliada: Si tienes acceso a una, mete la prenda con un par de bolas de secado (o una toalla húmeda) y selecciona un ciclo corto a baja temperatura. En pocos minutos, las arrugas se suavizan.
• La olla mágica: Hierve agua en una olla y, usando el vapor que sube, pasa la prenda cerca (sin mojarla ni quemarte). Es un truco casero que da buenos resultados para arrugas ligeras.
• Compresa de toalla: Humedece una toalla limpia, colócala sobre la prenda extendida y presiona suavemente. La combinación de humedad y presión ayuda a que la tela se relaje.
• Técnica del burrito: Enrolla la prenda como si fuera una alfombra y déjala así unos minutos. Al desenrollarla, estira con las manos las zonas arrugadas. Ideal para camisas y blusas ligeras, indica Xataka.
• Plancha de cabello al rescate: Para detalles como cuellos o puños, esta herramienta es sorprendentemente útil. Pásala unos segundos por la zona arrugada (sin excederte con el calor) y listo.