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¿Sabías que en el 2006 la diferencia de votos fue tan estrecha que contaron voto por voto?

El 2 de julio de 2006, los mexicanos acudieron a las urnas para elegir a su próximo presidente. Al cierre de las votaciones, los resultados preliminares indicaban una diferencia mínima entre los dos principales candidatos

¿Sabías que en el 2006 la diferencia de votos fue tan estrecha que contaron voto por voto?

MÉXICO.- Las elecciones presidenciales de 2006 en México fueron uno de los eventos más polémicos y reñidos en la historia electoral del país.

La contienda entre Felipe Calderón del Partido Acción Nacional (PAN) y Andrés Manuel López Obrador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) se convirtió en una batalla feroz que culminó en una diferencia de votos tan estrecha que obligó a un recuento voto por voto en varias casillas.

El 2 de julio de 2006, los mexicanos acudieron a las urnas para elegir a su próximo presidente. Al cierre de las votaciones, los resultados preliminares indicaban una diferencia mínima entre los dos principales candidatos.

Felipe Calderón fue declarado ganador por el Instituto Federal Electoral (IFE) con una ventaja de apenas 0.56% sobre López Obrador.

Esta estrecha diferencia desencadenó una serie de protestas y demandas de recuento por parte del PRD y sus seguidores, quienes alegaban irregularidades y fraude electoral.

La consigna de “voto por voto, casilla por casilla” se convirtió en el grito de batalla de los simpatizantes de López Obrador. Las manifestaciones en el centro de la Ciudad de México, especialmente en el Zócalo y la Avenida Reforma, reflejaron la profunda división y la tensión que se vivía en el país.

La situación llevó al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) a ordenar un recuento parcial de los votos en cerca del 9% de las casillas.

El proceso de recuento fue exhaustivo y supervisado por representantes de ambos partidos y observadores nacionales e internacionales. A pesar del recuento, el TEPJF ratificó la victoria de Felipe Calderón, quien asumió la presidencia el 1 de diciembre de 2006.

No obstante, el proceso electoral dejó una marca indeleble en la política mexicana, evidenciando la necesidad de mayor transparencia y confianza en los procesos democráticos del país.

Las elecciones de 2006 subrayaron la importancia de un sistema electoral robusto y confiable. La estrecha diferencia y el recuento de votos generaron un debate nacional sobre la validez y la equidad de los resultados electorales.

Además, estas elecciones impulsaron reformas y mejoras en el sistema electoral mexicano para evitar futuros conflictos de esta naturaleza.

Hoy, a casi dos décadas de ese acontecimiento, la elección de 2006 sigue siendo un referente en la historia política de México.

La demanda de un recuento voto por voto simboliza la lucha por la transparencia y la justicia electoral, recordándonos la importancia de la integridad en los procesos democráticos.

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