5 alimentos que tu perro NO debe comer y por qué pueden ser peligrosos para su salud
Conoce cuáles son los alimentos que tu mascota NO debe comer, por qué pueden ser peligrosos y cómo evitar riesgos en su salud con recomendaciones simples y seguras.

Cuidar lo que come un perro es una parte esencial de su bienestar diario. Aunque muchos ingredientes forman parte de la dieta humana sin riesgo, en los perros pueden generar intoxicaciones, daños digestivos o complicaciones que afectan órganos como el corazón, los riñones o el hígado. Diversas fuentes de divulgación veterinaria y organizaciones especializadas en salud animal coinciden en que ciertos alimentos comunes deben evitarse por completo debido a sus efectos tóxicos.
Esta guía reúne información básica, útil y verificada para ayudarte a identificar cinco alimentos que no deben estar al alcance de tu perro. La finalidad es ofrecerte herramientas prácticas para prevenir accidentes y tomar decisiones más seguras sobre la alimentación en casa.

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¿Por qué algunos alimentos son peligrosos para los perros?
El sistema digestivo de un perro procesa los nutrientes de forma distinta al humano. Sustancias que para nosotros son inofensivas pueden alterar sus glóbulos rojos, afectar su sistema nervioso o provocar una falla orgánica en pocas horas. Muchos casos de intoxicación ocurren por desconocimiento o por compartir comida preparada sin revisar los ingredientes.
Conocer qué alimentos deben evitarse es una medida preventiva fundamental para cualquier persona que conviva con un perro.
1. Chocolate: la teobromina es el verdadero riesgo
El chocolate contiene teobromina, un compuesto que los perros no pueden metabolizar con rapidez. Cuando se acumula en su cuerpo, puede provocar síntomas que requieren atención urgente:
- Vómito
- Diarrea
- Aceleración cardíaca
- Temblores
- Convulsiones
Las presentaciones más oscuras o puras contienen niveles más altos de teobromina, por lo que son más peligrosas. Incluso pequeñas cantidades pueden generar reacciones severas.

2. Cebolla y ajo: afectan directamente a los glóbulos rojos
Tanto la cebolla como el ajo contienen compuestos que pueden destruir glóbulos rojos en los perros y causar anemia. Estos ingredientes están presentes en sopas, guisos, salsas, comida preparada y sazonadores.
Entre los síntomas más comunes se encuentran:
- Letargo
- Encías pálidas
- Dificultad para respirar
- Desmayos
Por esta razón, no se recomienda darles sobras de comida casera que puedan contenerlos.

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3. Uvas y pasas: riesgo de insuficiencia renal
Las uvas y las pasas son tóxicas para los perros incluso en cantidades mínimas. Se desconoce qué compuesto genera el daño, pero su efecto está ampliamente documentado por veterinarios en distintos países.
Los síntomas suelen aparecer pocas horas después de ingerirlas:
- Vómito
- Diarrea
- Letargo
- Falta de apetito
Si no se atiende a tiempo, pueden desarrollar insuficiencia renal aguda.
4. Aguacate: la persina puede causar complicaciones
El aguacate contiene persina, una sustancia que puede afectar a varias especies animales, incluidos algunos perros. Su reacción dependerá de la sensibilidad del animal, pero los riesgos incluyen:
- Malestar gastrointestinal
- Dificultad respiratoria
- Acumulación de líquido alrededor del corazón
No se recomienda ofrecerlo en ninguna presentación, incluida la pulpa, la cáscara o el hueso.

5. Alcohol y bebidas fermentadas: tóxicos incluso en pequeñas cantidades
El alcohol afecta rápidamente el sistema nervioso central de los perros. Una cantidad pequeña puede causar:
- Descoordinación
- Vómito
- Baja temperatura corporal
- Problemas respiratorios
El consumo accidental de masas crudas fermentadas también representa un riesgo, ya que el proceso de fermentación puede generar alcohol dentro del estómago.

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Para mantener seguro a tu perro, considera estas medidas básicas:
- Guarda los alimentos peligrosos fuera de su alcance.
- Evita darle comida preparada o restos de la mesa.
- Revisa los ingredientes de panes, galletas o postres antes de compartirlos.
- Consulta a un veterinario ante cualquier síntoma inesperado.
Si sospechas que tu perro comió alguno de estos alimentos, busca atención veterinaria inmediata.
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