La esencia de San Carlos

Desde el arranque se respiraba un ambiente relajado y festivo, con grupos de amigos y familias que recorrieron las zonas “lounge” para probar cervezas artesanales y compartieron momentos increíbles entre luces tenues, música y brisa marina.

La convivencia fue el hilo conductor del evento: cada rincón del festival parecía diseñado para quedarse, conversar y disfrutar del momento sin prisa; la música en vivo estuvo presente en cada fase del día y sonó hasta la madrugada del domingo, para entretener al público.

Desde los acordes suaves al atardecer hasta los ritmos más intensos al caer la noche, el “line-up” compuesto por Tony Vitro, Silencio de Blanka y Utopía fue clave para mantener la energía arriba: el público bailó, coreó sus canciones favoritas y se dejó llevar por un ambiente donde todos estaban en la misma sintonía, que fue disfrutar al máximo la experiencia.Más allá de la oferta culinaria y artística, lo que realmente hizo destacar esta edición fue la vibra del evento: ese espíritu de celebración espontánea, de sentirse parte de una comunidad que sabe disfrutar y compartir.San Carlos BeerFest 2025 no sólo fue un éxito por su organización o su ubicación de ensueño, sino por haber creado un ambiente cálido, divertido y auténtico, donde cada asistente encontró un espacio para conectar.

Una edición que confirma que el festival ya es parte de las grandes citas del verano en Sonora… y que aún tiene mucho por compartir para seguir sorprendiendo.