¿Conoces la historia del Palacio de Lecumberri?
Este recinto fue inaugurado por Porfirio Díaz y su gabinete, el 29 de septiembre de 1900; su construcción respondía a la necesidad de modificar el defectuoso sistema penitenciario del país.
Para la nueva penitenciaría de la ciudad de México, se eligió un predio conocido como “La cuchilla de San Lázaro”, que fue propiedad de un español de apellido Lecumberri.
La cárcel se construyó en la prolongación de la calle del mismo nombre, de estilo ecléctico y afrancesado, típico del siglo XIX, el Palacio de Lecumberri resaltaba su función represiva gracias a elementos como torreones, aspillas y almenas.
Al ingeniero Antonio Torres Torija se le encargó el proyecto arquitectónico, su diseño se basó en la ideología de los panópticos, la cual consiste en la facultad de ver desde un punto central todo el interior de un edificio (cárcel en este caso), y recíprocamente desde cada celda pueda verse ese punto central.
Lecumberri albergó presos, tanto hombres como mujeres, hasta 1954, cuando se inauguró la cárcel de mujeres, desde entonces, sólo hubo presos varones.
Sin embargo, comenzó a haber una sobrepoblación, desde el sexenio de Miguel Alemán hubieron encarceladas por ser opositoras al régimen priísta, hecho que agravó los problemas de aglomeración; desde entonces se le llamó popularmente “El palacio negro”.
En 1977 se determinó que la nueva sede del Archivo General de la Nación fuera esta antigua penitenciaría, por lo que se inició una magnífica remodelación y se inauguró el 27 de agosto de 1982.
La obra original del ingeniero Torres Torija se preservó en general, pero fue necesaria la demolición de muros, desmonte de rejas, arreglo y aplanado de marcos de cantera en fachada y muros en el interior, la creación de la cúpula central, instalaciones eléctrica, hidráulica, de riego, agua potable, drenaje, sistema contra incendios, etc.
Por el Palacio de Lecumberri pasaron los cuerpos sin vida de Francisco I. Madero y José María Pino Suárez (asesinados a espaldas del edificio en 1913.
Estuvieron presos Pancho Villa, Heberto Castillo, Ramón Mercader (asesino de León Trotsky), David Alfaro Siqueiros (en cuatro ocasiones), el poeta colombiano Álvaro Mutis, así como los luchadores sociales, Valentín Campa, José Revueltas y Demetrio Vallejo.
Estuvieron presos también asesinos seriales como Gregorio “El goyo” Cárdenas; “El sapo”, quien se dice que mató a más de 150 personas; así como el narcotraficante cubano Alberto Sicilia Falcón, quien fue uno de los primeros en crear un red para traficar droga a los Estados Unidos, también mantuvo relaciones amorosas con Irma Serrano y Dolores Olmedo.
El barítono Francisco Sierra, pareja de la cantante Esperanza Iris, estuvo en esta prisión por fraude.
Sigue nuestro canal de WhatsApp
Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí