"Carne y arena" en la realidad virtual

Después de 17 años, González Iñárritu volvió a sorprender en Cannes, que este año celebra su edición número 70, y es que en un espacio adaptado para la ocasión el cineasta mexicano presentó su primer cortometraje de realidad virtual titulado "Carne y arena" en el que también contó con la participación del cinefotógrafo de Emmanuel Lubezki.

Este corto aborda la temática de la inmigración, y para el ejercicio, los pocos espectadores portaron un traje especial, descalzos y en solitario, en una sala cubierta de arena se les colocó una mochila y lentes de realidad virtual, que los ubicó entre un grupo de migrantes errantes en el desierto que separa a México de Estados Unidos, forzándolos a vivir en carne propia lo que los indocumentados pasan al querer cruzar la frontera.

La experiencia de seis minutos y medio de duración podría ser vista únicamente por 700 de los más de tres mil periodistas acreditados este año, en una sede que está a unos 20 minutos de donde se presentan los demás proyectos y donde no se permite tomar fotografías ni videos.

Una de las cosas que más ha impactado a los críticos de Cannes es la angustia e incertidumbre que el espectador, convertido en protagonista, experimenta al ser repentinamente descubierto por una patrulla fronteriza y perseguido en lo que se denomina una cacería de indocumentados.