Será un All-Star de la NBA muy diferente

Atlanta, Georgia.- Atlanta recibe el All Star Game de la NBA, 18 años después de aquella legendaria noche, donde Michael Jordan se despidió de este tradicional encuentro que ha sido el máximo escaparate de los mejores jugadores de baloncesto del planeta.

Sin embargo, las condiciones son muy diferentes al 2003. Ahora no habrá las fiestas de los jugadores, los eventos públicos y privados; el trabajo comunitario, las conferencias de prensa ni todo el misticismo que rodea esta fiesta del deporte ráfaga.

Hace apenas unas semanas, la realización del Juego de las Estrellas de la NBA era una incógnita. La ciudad seleccionada para ser anfitrión en este año, Indiana, declinó su organización y le fue otorgada la edición del 2024.

En medio de la pandemia que ha azotado al mundo entero y que en términos de la NBA, les ha impedido realizar poco más del 5% de su calendario recortado de esta campaña, Atlanta, alzó la mano y dijo que podía organizar el juego.

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Prácticamente tres semanas después de la que hubiera sido la fecha original, y mientras se daban a conocer los nombres de los jugadores convocados, se definió que la State Farm Arena recibiera el encuentro, con algunos cambios significativos.

Las festividades originales que inician durante la semana, el Viernes de Novatos y el Sábado Espectacular, que sirven habitualmente como previo al gran evento, fueron suspendidos y recortados.

Toda la agenda se trasladó al domingo con dos concursos previo al salto inicial de la edición número 70 del Juego de las Estrellas, y el concurso de clavadas con sólo tres participantes en el medio tiempo del partido.

Aunque la NBA giró instrucciones para que los jugadores no participaran en ningún evento social o de hospitalidad relativo al Juego de Estrellas, la ciudad ha reportado un incremento muy considerable en la movilidad y presencia de turistas.

Incluso, los centros nocturnos que usualmente cierran a las dos de la mañana, recibieron la autorización de continuar operaciones hasta las 4:00 horas, en una evidente muestra de que al parecer, esta ciudad, es inmune al virus que ha atacado al mundo entero y no quisieron dejar pasar la presencia de la NBA y el inicio de las vacaciones de Spring Break.