En medio de conflictos se reanuda la Liga Portuguesa

La Liga de Portugal será la segunda en Europa en retomar acciones tras la suspensión obligada por la pandemia de coronavirus, pero lo hará en medio de inconformidades por parte de los equipos.

La autorización para reanudar el torneo, que fue suspendido a 10 jornadas de terminar, se dio con la condición de que se siguiera un estricto protocolo sanitario, que no fue del agrado de algunos clubes, al chocar con sus intereses particulares.

Por ejemplo, Dirección General de Sanidad señalaba que lo mejor era jugar en el menor número de estadios posibles, pero 16 de los 18 equipos jugarán en sus propios recintos.

Otra queja es hacia la proposición de la Liga de autorizar cinco cambios. El único club en contra de esta medida es el Maritimo de Madeira.

El presidente de la Liga Portugal, el ex árbitro internacional Pedro Proença, enfrentará numerosas críticas en una asamblea que reunirá a aquellas organizaciones inconformes.

El presidente del Benfica, Luis Filipe Vieira, acusado por el Porto de encabezar la rebelión, reconoció sentirse ‘indignado’ por una carta hecha por Proença, donde solicitaba a políticos apoyo para transmitir partidos en televisión abierta y así evitar aglomeraciones de aficionados en las afueras de los estadios.

Algunos equipos como el mismo Benfica y Braga no están de acuerdo con esta idea, pues temen a quedar mal con los operadores quienes pagan por los derechos de trasmisión.

Esto obligará al gobierno a montar operativos de seguridad, pues al ir los juegos por televisión de paga, muchos querrán acudir a los inmuebles a ver lo más cerca posible a sus equipos, sin respetar la sana distancia que evite la propagación del virus.