¿Peligra la participación de Cuba y Venezuela en el Clásico Mundial de Beisbol por las restricciones de Donald Trump?

El Clásico Mundial de Beisbol 2026, programado del 5 al 17 de marzo, promete ser un espectáculo de alto voltaje, pero las selecciones de Cuba y Venezuela enfrentan un nuevo obstáculo: las restricciones de visado del presidente Donald Trump impone a ciudadanos de ambos países.

Anunciadas el 4 de junio de 2025 y efectiva desde el 9 de junio, estas medidas suspende la entrada a Estados Unidos de cubanos y venezolanos bajo visas de inmigrante y no inmigrante (B-1, B-2, B-1/B-2, F, M y J), citando deficiencias en la cooperación migratoria y seguridad. Con Cuba en el Grupo A en San Juan, Puerto Rico, y Venezuela en el Grupo D en Miami, Florida, ¿cómo afectará esta política a sus aspiraciones en el torneo?

Cuba: Entre la apertura y las barreras

Cuba, ubicada en el competitivo Grupo A junto a Puerto Rico, Canadá, Panamá y Colombia, jugará en el Estadio Hiram Bithorn de San Juan, un territorio estadounidense sujeto a las restricciones migratorias. La proclamación señala a Cuba como un “estado patrocinador del terrorismo” que no comparte información policial y rechaza aceptar deportados, además de reportar altas tasas de sobreestadía de visas (7.69% para B-1/B-2 y 18.75% para F, M y J, según el DHS de 2023). Esto complica la participación de jugadores que residen en la isla, quienes necesitarían visas para ingresar a Puerto Rico.

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Sin embargo, una excepción en la proclamación para atletas en eventos internacionales, como lo es el Clásico Mundial, podría permitir el uso de visas P-1 (para atletas reconocidos), no afectadas directamente por la suspensión. En 2023, Cuba rompió su tradición al incluir a jugadores de ligas extranjeras, como Yoán Moncada y Luis Robert de la MLB, logrando llegar a semifinales.

Sin embargo, la Federación Cubana de Beisbol (FCB) mantiene restricciones sobre jugadores considerados “desertores”, lo que podría limitar la convocatoria de estrellas como Aroldis Chapman, Yordan Álvarez, entre muchos otros que juegan en las Grandes Ligas. Los peloteros con residencia legal en EE.UU. no enfrentarían problemas, ya que viajar a Puerto Rico es un trayecto doméstico, pero aquellos que radican en Cuba o terceros países dependerán de trámites migratorios que podrían ser lentos o estrictos.

Venezuela: Talento de sobra, pero con trámites por delante

Venezuela, asignada al Grupo D en el loanDepot Park de Miami junto a República Dominicana, Países Bajos, Israel y Nicaragua, cuenta con un arsenal de estrellas de la MLB, incluyendo a José Altuve, Ronald Acuña Jr., Salvador Pérez y Luis Arráez. La prohibición de Trump apunta a Venezuela por la falta de una autoridad central confiable para emitir pasaportes, medidas inadecuadas de selección y su negativa a aceptar deportados. Esto afecta a los jugadores que residen en Venezuela o en ligas extranjeras, quienes necesitarán visas para entrar a EE.UU.

Afortunadamente, la excepción para eventos deportivos internacionales debería facilitar la participación de la mayoría del roster venezolano, probablemente mediante visas P-1. Los jugadores establecidos en la MLB con residencia legal en EE.UU. no enfrentarán obstáculos, lo que asegura la presencia de figuras clave. Sin embargo, aquellos basados en Venezuela, como prospectos o jugadores de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, podrían enfrentar demoras en los trámites, especialmente dada la situación política del país, que ha complicado procesos migratorios en el pasado.

Un desafío logístico y político

Ambas selecciones enfrentan un panorama complejo. La excepción para atletas ofrece esperanza, pero las federaciones de Cuba y Venezuela deberán coordinar con la MLB, la WBSC y las autoridades estadounidenses para garantizar que los trámites de visas se completen a tiempo. La experiencia de eventos pasados, como la denegación de visas a la delegación cubana de atletismo en 2025, subraya la importancia de una planificación temprana. Además, la revisión semestral de la proclamación (cada 180 días) podría alterar las restricciones antes del torneo, aunque no hay garantías.

Competitivamente, Venezuela parece mejor posicionada gracias a su roster repleto de estrellas de la MLB y un grupo menos complicado. Cuba, en cambio, enfrenta un Grupo A feroz y restricciones internas que podrían limitar su alineación.