Los Rays de Tampa Bay podrían no jugar en el Tropicana Field al inicio del 2025 tras los destrozos del huracán Milton

Los Rays de Tampa Bay se encuentran en una encrucijada de cara a la temporada 2025 de las Grandes Ligas. El paso del huracán Milton, con categoría 3, dejó estragos considerables en el Tropicana Field, su estadio, desprendiendo grandes secciones del techo y exponiendo el terreno de juego a las torrenciales lluvias.

Esto ha obligado al equipo a buscar una nueva sede temporal, ya que los trabajos de reparación no estarían listos a tiempo para el Opening Day el 27 de marzo.

La misma noche del huracán, las redes sociales estallaron con imágenes que mostraban el techo del estadio desprendiéndose y los efectos devastadores de la tormenta sobre el diamante, inundado y prácticamente inservible.

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Según el Tampa Bay Times, los daños al Tropicana Field son tan severos que el inmueble deberá someterse a una remodelación extensa, lo que lo deja fuera de juego para el inicio de la temporada.

Es un golpe duro para la organización, pero estamos explorando todas las opciones posibles para arrancar la temporada con pie firme”, comentó la dirección de los Rays.

La gerencia ya se ha puesto manos a la obra, analizando estadios alternos donde puedan disputar las primeras series del año, aunque aún no hay una decisión definitiva. La expectativa es que en las próximas semanas se haga el anuncio oficial sobre la nueva casa temporal del equipo.

El huracán Milton ha dejado a los Rays con un reto monumental en términos de logística y presupuesto. Además de enfrentar una reconstrucción costosa del Tropicana Field, el equipo tendrá que manejar el traslado de su operación a otro estadio y asegurar que sus fieles aficionados puedan acompañarlos en esta transición. A esto se suma la presión de arrancar bien la temporada, en lo que será un escenario completamente ajeno.

Según los registros, hace más de 100 años que Tampa Bay no sufría los estragos de un huracán de tal magnitud. Cabe señalar, que la remodelación no se espera que tenga una fuerte inversión económica, puesto que el contrato de los Rays con el inmueble vence al finalizar la temporada del 2028 y en teoría el club ya estaría pensando a donde mudarse.

El reloj ya está corriendo y los Rays deberán ajustar rápidamente sus planes para que, cuando llegue el primer lanzamiento del 2025, el equipo esté listo para seguir compitiendo al más alto nivel, aunque sea lejos de su habitual casa en St. Petersburg.