Decisiones rumbo al mundial: Conciliar, polarizar o incendiar
El problema fundamental de la doctora Claudia Sheinbaum es que se celebrara una parte del Mundial FIFA 2026 y no podrá polarizar o usar lenguaje incendiario sin que haya un impacto político o de seguridad nacional para el País.

Ana María Salazar
La reacción inicial de la presidenta Claudia Sheinbaum, al igual que su predecesor Andrés Manuel López Obrador, al ser cuestionada, usa la “estrategia de polarización: “Los que no están con la Cuarta Transformación son conservadores, neoliberales, clasistas, corruptos, odian a México, odian a los pobres, están en contra del pueblo o son agentes del extranjero”. Y aunque hubo momentos durante el sexenio de López Obrador, el entonces Presidente usó palabras y lanzó acusaciones que podrían considerarse incendiarias en contra de la comunidad de la UNAM, madres buscadoras, y colectivos feministas y hasta los EZLN, los grupos afectos no reaccionaron con violencia sistemática.
En el caso de la Presidenta no podrá usar un lenguaje polarizante o incendiario de la misma forma que su predecesor sin conllevar costos políticos para ella, su partido, y la imagen del País. El problema fundamental de la doctora Claudia Sheinbaum es que se celebrara una parte del Mundial FIFA 2026 y no podrá polarizar o usar lenguaje incendiario sin que haya un impacto político o de seguridad nacional para el País.
Como lo comenté en este espacio la semana pasada, la historia nos recuerda cómo surgen movimientos sociales y protestas masivas en la antesala de eventos internacionales en aquellos países organizadores. La explicación es simple: Antes de la que se lleve a cabo el evento, los ojos del mundo, los medios internacionales y nacionales le ponen especial atención a la situación política, gobernabilidad y seguridad en el país anfitrión. Cómo olvidar las marchas, protestas y la brutal represión del Gobierno mexicano ante las protestas de estudiantes en 1968 semanas antes de que llevaran a cabo las Olimpiada en México. Esta coyuntura lo entiende perfectamente “los maestros de la CNTE, los agricultores enfurecidos por los precios de sus cosechas, poblaciones como Uruapan, que se sienten desprotegidos del crimen organizado, las madres buscadoras que observan con horror cómo se ha vivido el año con más desapariciones en el País, médicos y pacientes que protestan por la falta de recursos, jueces y magistrados que no han sido compensados como sea acordó ante la elección de jueces, el movimiento “Generación Z” en México -un colectivo juvenil (jóvenes entre 13 y 28 años) nacido en redes (Discord, Instagram y TikTok) organizando marchas a nivel nacional para protestar contra la inseguridad, la corrupción y otras injusticias. Y también lo aprovecharán los partidos de la oposición lo anarquistas y otros grupos que busquen desacreditar el Gobierno de México.
La estrategia que uso de la fuerza del Gobierno de la CDMX y de Jalisco para controlar las protestas impactaron la imagen de México ante el mundo. Por más que se queje la Presidenta, y funcionarios de que no fueron jóvenes que marcharon y que es una marcha de la oposición, la violencia de la Policía y las personas que detuvieron en la protesta no fueron los infiltrados violentos o miembros del “Bloque Negro”. Las imágenes de violencia le dieron la vuelta al mundo, y las incendiarias palabras de la Presidenta, en lugar de ser un incentivo de detener las marchas y las protestas, tendrán un efecto contrario por la atención internacional que recibieron los eventos del 15 de noviembre. Hasta el mismo presidente Donald Trump lo comentó desde la Oficina Oval cuando estaba anunciando un programa especial para facilitar el acceso a visas a personas que viajarán a Estados Unidos para presenciar el Mundial.
En reacción es estas movilizaciones y protestas, la Presidenta anunció que ella tendría su mitin político en diciembre para demostrar el apoyo que tiene su Gobierno y la Cuarta Transformación. Esta decisión podría incendiar el País y no ayudará a cambiar la opinión de la comunidad internacional.
Ahora los transportistas, los campesinos y la CNTE ya amenazaron con movilizaciones y futuras marchas de jóvenes. A siete meses del Mundial la imagen del País y de la Presidenta está en la picota internacional. Llegó la hora de cambiar de estrategia, buscar conciliar, en lugar de fracturar a la comunidad, romper la cohesión social, generar bandos, fisuras entre sectores usando usado lenguaje polarizante e incendiaria como una forma desviar la atención a los verdaderos problemas que enfrenta México. De lo contrario estará promoviendo a corto plazo protestas y movilizaciones más agresivas y violentas ahora que estamos a siete meses rumbo al Mundial.
Sigue nuestro canal de WhatsApp
Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí
Grupo Healy © Copyright Impresora y Editorial S.A. de C.V. Todos los derechos reservados