Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas /

El concepto pueblo en AMLO y CSP

He analizado con cuidado el uso que los dos dan al concepto pueblo, sobre todo en el marco de sus comparecencias mañaneras...

Rubén Aguilar

En el diccionario de la lengua de la Real Academia Española (RAE) la palabra pueblo, que viene del latín populus, tiene cinco posibles significados: Ciudad o villa; población de menor categoría; conjunto de personas de un lugar o país; gente común y humilde de una población y un país con gobierno independiente.

Hay una mayor precisión de la palabra pueblo en el diccionario del estudiante de la misma RAE, donde propone cuatro significados: Población de menor categoría que la ciudad, de pequeño tamaño, y cuyos habitantes tienen a menudo actividades agrícolas o ganaderas; conjunto de habitantes de un territorio, unidos por vínculos políticos o culturales; conjunto de personas que tienen un origen étnico común y clase social constituida por la gente más humilde.

En la Inteligencia Artificial (IA), que consulte, se afirma que el concepto de pueblo tiene una doble naturaleza: Por un lado, designa a la totalidad de una comunidad política, como los ciudadanos de un Estado; por otro, se refiere a los sectores más humildes y populares de esa comunidad, históricamente asociados con la gente menuda, el pueblo llano.

El candidato y presidente López Obrador (2018-2024), fundador del partido Morena, en sus discursos y comparecencias mañaneras introdujo el uso sistemático del concepto pueblo, y de la misma manera, imitándolo, ahora lo hace la presidenta Sheinbaum Pardo, su discípula predilecta y más cercana.

En un primer momento se pudiera pensar que él y ella el concepto pueblo lo utilizan en el sentido de “clase social constituida por la gente más humilde” o “los sectores más humildes y populares de esa comunidad, históricamente asociados con la gente menuda, el pueblo llano.

He analizado con cuidado el uso que los dos dan al concepto pueblo, sobre todo en el marco de sus comparecencias mañaneras, y lo que concluyo es que se refieren a un ente abstracto y amorfo, que no piensa y tampoco se representa por sí mismo, y ellos son sus únicos y auténticos representantes, y los únicos que saben como piensa y lo que realmente necesita y quiere.

Si surge de verdad un grupo del pueblo con sus propias ideas, planteamientos y liderazgos, como pueden ser los grupos de las madres buscadoras y de padres de niños con cáncer que no reciben medicinas, de inmediato son calificados de agentes que representan a la derecha y a los conservadores. En el mejor de los casos están manipulados por estos.

Para López Obrador y ahora la presidenta Sheinbaum Pardo, pueblo, reiteró, es solo ese conjunto amorfo de personas, de los “sectores más humildes y populares”, que no piensa y habla por sí mismo, sino solo a través de ellos, y ahora solo de ella. Esa concepción la heredó de su líder y mentor, su antecesor en la presidencia.

La concepción de la Presidenta nada tiene que ver con la idea de un grupo o grupos sociales que se organizan por su cuenta, con sus propios liderazgos, en defensa de sus intereses y para cambiar el estado de cosas en una sociedad, para hacerla más justa, equitativa y digna para todos. Estos, en su concepción no son revolucionarios, sino conservadores.

Solo el colectivo amorfo que ella representa es sujeto de cambio.

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí