‘Hay que agradecer que tenemos vida’

Tijuana, BC.- Ellie Vargas ansiaba que llegara el 10 de mayo para disfrutar del primer bailable ante un escenario de su hija Estrella, de un año y cuatro meses, pero el coronavirus (covid-19) les cambió el plan.

Así como esta familia, miles se tuvieron que adaptar a las nuevas circunstancias: Permanecer en casa, sin reuniones, para evitar contagios, aunque los sentimientos se mantuvieran a flor de piel, pues para muchos esta es la primera vez que no pasarían cerca de su mamá.

Algunas familias pusieron música, realizaron llamadas o utilizaron las redes sociales para iniciar una fiesta virtual y salvar el festejo del Día de las Madres.

Mientras, en el sobrerruedas de la colonia Francisco Villa las mamás festejaron su día como cualquier otro, aunque esta vez resintieron permanecer más dentro de su hogar.

“Salimos los tres, todos con cubrebocas, porque es pesado estar siempre en la casa, el mercado es nuestra única distracción, primero venimos a dar la vuelta para ver algo diferente y después agarramos el mandado”

“Se extraña andar en la playa, en el parque, con toda la familia, pero hay que aguantarnos y agradecer que tenemos vida”, expresó la señora Verónica Garibay.

ABARROTAN FLORERÍAS

En la avenida Revolución atrás quedaron las serenatas, los conciertos improvisados de la Plaza Santa Cecilia, las largas filas para ingresar a los restaurantes, pues solo ofrecían el servicio a domicilio.

En la calle Quinta se recuperó el ambiente de fiesta y cierto desorden, pues los floristas no se dieron abasto para atender a los clientes, quienes a pesar de estar restringidas las reuniones familiares, encontraron la forma de juntar a las mamás de la familia para entregarles al mismo tiempo los detalles florales.

Tome nota

Algunas familias pusieron música, realizaron llamadas o utilizaron las redes sociales para iniciar una fiesta virtual y salvar el festejo del Día de las Madres.