La derecha y los tontos útiles

Habituados a vivir del agio; los clanes de la burguesía en México han hecho del “importan los fines no los medios” un honorable modo de vivir seducidos, raras excepciones, por el antónimo medrar cuyo vocablo contradictorio igual significa prosperar que arruinar donde, el cúmulo de riqueza de unos pocos, resulta la miseria de millones.

“toda propiedad – escribió el libertario Proudhon- es un robo” enfatizando así, el sucesivo proceso que la humanidad ha protagonizado desde el modo de producción primitivo al capitalista con su previo transito esclavista y feudal.

Un sumario de acumulación material que pasado el tiempo redujo, a toda organización productiva y de esfuerzo común, en acopio individual de minúsculos linajes o clases sociales que de acuerdo a Enrique Semo (Origen del capitalismo en México), en este terruño el Imperio Azteca alcanzó su auge sometiendo, saqueando y explotando a las tribus vencidas imponiéndoles un poder brutal que siglos después equivale, sesgos a modo, a un pretérito que no termina de morir en el México moderno en referencia al papel concedido al capital y el aplicado a la fuerza laboral pues el dominio de aquel persiste, periodos después, igual de bárbaro mientras, éste, continua postrado ante el altar de los estafados.

Y aún más; en la configuración del Estado-Nación la ruptura entre pasado y presente el desenlace ha sido, por accidente o flaqueza, fallido ya fuese en el tránsito indígena al colonialismo español que del cruce independiente, su travesía por la Reforma o continuado corretear revolucionario hasta rematar en el demoledor régimen priista donde el poder económico y político se mantiene y retiene en las zarpas eternas de una temporalidad devastadora, que al imponerse por la fuerza del saqueo, sobrevive en la insolvencia de quienes de pie cargan la sombra de su descomunal pobreza.

Precisamente por esas causas el carácter burgués de medrar a las “costillas de otros” en la primer ronda se manifiestan rotundos, sobreentendidos y sin tapujos de parte de la elite patronal de suyo habituada a presionar por medio de chantajes y amenazas de todo tipo cada ocasión, y siempre, que estime necesario hincar la mordida sobre rentables recursos públicos convenientes de adjudicarse a sus arcas con el mínimo esfuerzo, tal y lo evidencia la coyuntura del Covid-19 donde - las cúpulas empresariales- ante la negativa a complacerlos decretaron suspender pago de impuestos, crear un nuevo pacto fiscal, litigar juicios de amparo, despedir a los trabajadores o cerrar fabricas sin el pago correspondiente salarial.

Efectivamente; la derecha patronal y política azorada al inicio de la momentánea situación pasó a reclamar para luego irritada golpetear al gobierno lopezobradorista mediante ostentosos insultos, mentiras falaces y diversos amagos que los mantienen en el sombrío sótano de su ser y pensar conspirativo, santurrón e hipócrita que va del desahogo al linchamiento político de los opuestos a sus acostumbrados antojos.

Y como suele suceder, a la orquesta derechista se le suman los cascarrabias e infaltables tontos útiles…

* El autor es diplomado en Periodismo por la UABC