Jóvenes con discapacidad esperan una oportunidad

HERMOSILLO.- Luego de años de estudio y tras obtener un título universitario encontrar un trabajo después de terminar una carrera universitaria es el sueño de muchos jóvenes, entre ellos quienes viven con algún tipo de discapacidad.

María Antonieta Castro, de 22 años, nació con esclerosis lateral primaria, una discapacidad que le impide moverse y para trasladarse lo hace en silla de ruedas. Con el apoyo de sus padres estudió la licenciatura en Sicología en la Universidad de Sonora.

Hace dos años que egresó, ha aplicado en varias escuelas particulares para ejercer su profesión, pero no le han dado la oportunidad. Comentó que hizo un interinato en una escuela pública, pero no le han dado la oportunidad de tener una base.

Sí estuve trabajando toda la mitad de este año en una escuela especial, pero sí está muy difícil la verdad, siento que en general, no nomás para uno como persona con discapacidad, pero según esto deben de aceptar cierto porcentaje de personas en cada empresa, pero no lo respetan”, señaló.

A pesar de que no cuenta con un empleo, María Antonieta es una persona que invierte su tiempo en labores altruistas, actualmente es la representante de Sonora en WheelChair México y colabora con Shriner’s Sonora.

QUIERE SUPERARSE
David Antonio Silva Cáñez, nació sin manos y sin la extremidad de la pierna derecha, desde niño recibió el apoyo de Shriner’s para que tuviera sus prótesis, pero al cumplir 18 años se le retiró este beneficio, ya que sólo es para menores de edad.

Hoy tiene cerca de 24 años, una carrera inconclusa en Ingeniería de Software en la Universidad Estatal de Sonora y las adecuaciones de las prótesis ya no le quedan. Sueña con tener una prótesis para su pierna derecha, ha buscado los apoyos entre la comunidad porque afirma no ha habido respuesta de las autoridades.

Buscó trabajo en algo que se relacionara con la carrera que empezó a estudiar, pero no encontró y hace cerca de un año encontró una oportunidad en una empresa concesionaria del transporte, primero con la limpieza del interior de las unidades y después como checador, pero por la pandemia en este año lo mandaron a su casa.

HACE FALTA AVANZAR
Manuel Ceres, presidente del Instituto para el Desarrollo de Atípicos de Sonora (Ideas), explicó que en Sonora hay cerca de 200 mil personas con alguna discapacidad y aunque algunos de ellos han logrado obtener una oportunidad en la informalidad otros están a expensas de los donativos.

Comentó que el tema laboral para las personas con discapacidad está rezagado, son discriminados y los derechos de esta población es violentada porque no les respetan dentro del marco legal.

Un ejemplo es que el 2% de los trabajadores del Ayuntamiento y del Estado deben de ser personas con discapacidad para que haya un sistema de inclusión, sin embargo esta obligación la autoridad la tienen olvidada.

“Cada día nos alejamos más de la realidad de empleos para personas con discapacidad, el 2% tuvimos la fortuna de proponerlo al Congreso del Estado a la agrupación que yo represento e incluir obligatoriamente, es un mandato una obligación del 2% para el Gobierno del Estado y para los Municipios.

“Actualmente el Estado de Sonora tiene aproximadamente 10 mil trabajadores, de esos el 2% es una cantidad importante y no vamos ni a la mitad”, indicó Ceres.

Recordó que las empresas privadas también se ven beneficiadas con trabajadores atípicos porque el sueldo íntegro que percibe esta población se va directo al Impuesto Sobre la Renta, lo que ayuda al negocio a pagar menos impuestos.

Manuel Ceres pide tener personas con discapacidad en las curules del Congreso del Estado o representantes en los cabildos porque quien no padezca una dificultad nunca sabrá las necesidades que tiene la población atípica.

Recordó que la asociación Ideas, hace 21 años, tomó el Congreso para solicitar leyes a favor de las personas discapacitadas las cuales hasta el momento están en el olvido y en el cumplimiento infructuoso.