Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas / Columna Sonora

“Neutralidad política”, la apuesta de Durazo

Abonarle al Estado de Derecho y a la institucionalidad en todas las vertientes, son los retos puntuales del gobernador Durazo.

En el 15 Foro Empresarial de Coparmex Sonora Norte, el mandatario estatal Alfonso Durazo agarró el micrófono y dijo ante unos 300 asistentes que su Gobierno opera de acuerdo a la “neutralidad política”.

Esto, precisó, con el fin de empujar con más fuerza el potencial económico de Sonora.

En el evento que congregó a empresarios de todo el Estado y a conferencistas de primera línea: Fred Kofman, José Antonio Lozano Díez, Luis de la Calle y a Eduardo Caccia; llamó la atención tal precisión de Durazo sobre el modelo operacional de su Gobierno.

También dio pie a pensar que si bien Sonora tiene un mandatario que procede de las filas de Morena, él no necesariamente es del ala izquierda, sino más bien de centro en la escala del espectro político-ideológico.

¿Por qué Durazo puntualizó en ese Foro su estilo de manejar la administración sonorense?

Seguramente lo hizo porque quiere que el sector empresarial lo tome como una autoridad que sabe negociar con todas las fuerzas de la sociedad y que está dispuesto a crear un ambiente de unión más que desunión, para así generar certidumbre.

Abonarle al Estado de Derecho y a la institucionalidad en todas las vertientes, son los retos puntuales del gobernador Durazo.

“Viene un proceso de relocalización de grandes inversiones en el mundo que debe de aprovechar México y Sonora”, subrayó en el evento organizado por Kurt Gerhard López Portillo, y enfatizó, “este es el momento de Sonora”.

El mandatario recordó que China ha podido crecer de forma excepcional en las últimas dos décadas, gracias a los enormes capitales de empresarios estadounidenses que se instalaron en ese país asiático.

Esto mismo le puede pasar a México y a Sonora si se aprovecha la “ola nearshoring”.

Para ello Durazo quiere crear una alta confianza entre el empresariado y su Gobierno y de ahí su esquema operativo de la “neutralidad política”.

Este concepto de amplio alcance sociopolítico, es un principio que pretende delimitar el tipo de razones a las que puede apelar legítimamente la comunidad política para imponer sus dictámenes.

La neutralidad exige la “exclusión de ideales” en la justificación política, es decir, prohíbe que la acción política se sustente en una jerarquización de las diferentes concepciones de la buena vida (el bienestar).

La sociedad política (autoridades) debe orientarse al establecimiento de un marco neutral en el que los individuos puedan formar y perseguir libremente sus proyectos y ambiciones; lo cual no significa eliminar toda posible intervención del Estado en el mantenimiento de un adecuado número de opciones y prácticas culturales disponibles.

Es evidente que los individuos dependen de la estructura cultural de su sociedad para poder conducir formas de vida valiosas, y que el Estado es responsable, en parte, de mantener una cultura floreciente.

En pocas palabras, con la “neutralidad política” el gobernador Durazo busca trabajar en equipo (ser incluyente) por el bien de Sonora, independientemente de los colores partidistas y de las doctrinas económicas.

Para el sonorense todos tienen cabida en su proyecto de reactivar cuanto antes la economía estatal y por eso desde ahora promueve el nearshoring en el Estado con el soporte técnico y de relaciones públicas de su nuevo jefe de la Oficina del Ejecutivo Estatal, Francisco Acuña Méndez.

Con una “neutralidad política” bien aplicada, Sonora camina entonces a contracorriente de como lo hace la Presidencia de la República que todo desune y genera más desconfianza entre los inversionistas de todas partes.

¿Cómo hacerle para encriptar el modelo operativo duracista contra el “torbellino destructor” de la Ciudad de México? Desconectando (desenchufando) las mañaneras. Con esta acción, santo remedio en Sonora y en el resto del País.

RESTAURANTEROS A LA DEFENSIVA

Hoy arranca el penúltimo mes del año y la Canirac Sonora, que preside Manuel Lira Valenzuela, está de plácemes porque las estimaciones indican que se dispararán las ventas del sector, más ahora en los tiempos de la postpademia.

Pero no todo es felicidad, ya que justamente en estas fechas los uniformados municipales (específicamente los malos) andan a la caza de clientes y comensales, justo afuera de los establecimientos.

“Se acerca la mejor época del año y siguen las quejas de la sociedad y los restauranteros en el tema de acoso policial”, denuncia Lira Valenzuela.

En Hermosillo, el comisario Manuel Emilio Hoyos y el alcalde Antonio “Toño” Astiazarán, están tomando cartas en el asunto.

En esta nota