El panorama político cambió

Vaya paquete que tienen en sus manos los dirigentes (estén donde estén) de Morena. El pueblo habló en Coahuila e Hidalgo y el mensaje fue contundente: No funciona un Gobierno que busca culpables en el pasado para los serios problemas actuales. No funciona un Gobierno que toma a la ligera una pandemia que ya ha cobrado más de 86 mil muertes a nivel nacional.

No funciona un Gobierno más preocupado por emitir sus pronósticos de la Serie Mundial que en diseñar una ruta estratégica para combatir la inseguridad y la crisis económica que está ahorcando a muchos mexicanos.

Pero también hay un mensaje al PRI. No hagan una fiesta donde la realidad es que se trasluce un desencanto con la clase política y se vota por “el menos peor”. La pandemia pudo ser motivo, pero que la asistencia a las urnas no llegara al 40% es una clara señal de que las cosas no andan bien.

Pero la buena noticia para la “oposición” (PRI, PAN y MC) es que ya se acabó el mito de que Morena arrasaría una y otra vez. Hace un año en Baja California ganó Morena porque tenía un buen candidato a Gobernador y todavía se podía vivir del “efecto Peje”.

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CERRO DE LA CAMPANA

Eso ya se acabó, el pueblo va a pensar su voto con mayor seriedad. No hay ganadores automáticos. Los candidatos deben diseñar mejores campañas, mensajes reales, directos al pueblo, lejos de la demagogia que tanto nos han recetado elección tras elección.

En Sonora, la inminente alianza del PRI-PAN-PRD debe ser seria, transparente. Que pongan sobre la mesa los problemas del Estado y los municipios, con proyectos reales, convincentes. Ernesto Gándara luce como el favorito, pero antes debe pasar un proceso creíble. No olviden que el PAN también tiene una carta fuerte en la persona de Toño Astiazarán.

En Morena siguen hechos bolas a nivel local y nacional. Inventan una asamblea para decir que las “fuerzas vivas” están con Alfonso Durazo (PRI ochentero en todo su esplendor). Parten de una mentira porque saben perfectamente que es decisión tomada en Palacio Nacional. Su candidato debe explicar de frente a los sonorenses el rotundo fracaso en el combate a la delincuencia.

Ricardo Bours ya camina como la carta de Movimiento Ciudadano. Personaje interesante, pero debe pasar de las redes sociales y las frases efectistas al diagnóstico real de la situación. El compromiso es que nos diga qué trae en la bola y eso no es fácil.

Ana Gabriela Guevara ya volvió a sentir los golpes emanados desde algún “lugar oscuro”. Conociéndola, esos ataques la van a hacer que corra con más fuerza, pero antes tiene que limpiar su imagen tan golpeada en la Conade. Y, después, mostrar un camino convincente, porque esta elección no será sólo de “selfies”.

Lo que sí queda claro, después de los comicios en Hidalgo y Coahuila, es que el panorama ya cambió radicalmente. El mito del invencible acaba de morir. Ahora todos tienen el reto de leer bien al pueblo, sus motivaciones, sus expectativas, sus preocupaciones. Una vez transitado ese camino podremos empezar a hablar de votos.

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Cerro de la campana

El beisbol

Mientras las ligas deportivas más importantes del mundo toman muy en serio la crisis del Covid, parece que a la Liga Mexicana del Pacífico le importa un kilo de cacahuates. Pésimo lo sucedido en Ciudad Obregón durante el juego inaugural de los Yaquis, con estadio atestado y sin medidas de seguridad.

¿De qué privilegios goza la LMP? ¿No entienden que seguimos en alerta máxima? ¿No se dan cuenta que la gente sigue muriendo a causa de esta pandemia? A nivel estatal ya se decidió que los estadios no tendrán público. Como ya es costumbre, Celida López lo entendió y será dura en este aspecto.

Pero el alcalde de Cajeme, Sergio Pablo Mariscal, se queja porque debe tener algunos compromisos qué saldar. ¿Qué parte de rebrotes y pandemia fuera de control no entiende? Y luego porqué la gente se queja de los políticos de Morena.

Por cierto, ¿multarán o castigarán a los directivos cajemenses que no cuidaron los protocolos de seguridad? Debe haber algo ejemplar. Fueron irresponsables e insensibles.

Juan Pedro

Hasta siempre, amigo Juan Pedro Robles. El Covid fue demasiado y nos dejó con un desayuno pendiente. Hombre inteligente, simpático, efectivo, conocedor profundo de la política, pero sobre todo un gran ser humano y mejor amigo. Descansa en paz.