Acueducto, la salvación

Hermosillo estaba al borde de una sequía donde la disponibilidad de agua para el consumo humano sería de tres horas, por dos días a la semana, recuerda el ex Gobernador panista, Guillermo Padrés Elías, quien acaba de reaparecer públicamente.

Por ello, dice, “le tuvimos que entrar a la construcción de la obra de infraestructura más grande de mi sexenio: El Acueducto Independencia”.

El mandatario, que sacó del Palacio del Estado al PRI luego de 80 años en el poder sonorense, señala que los liderazgos del sector privado hermosillense le urgieron concretar la magna obra hídrica.

Simultáneamente crecía la férrea e histórica oposición de los terratenientes del Valle del Yaqui contra todo lo que huela a Hermosillo.

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CERRO DE LA CAMPANA

“Pero nosotros le dimos para adelante y ahora la capital del Estado crece y se desarrolla gracias a que hay agua”, expresa orgulloso el cananense quien indica que ya está de vuelta en la escena pública para explicar los resultados de su Gobierno.

Y tan pronto sale a la luz, el SAT le reclama más de 200 millones de pesos en impuestos.

La administración padresista (2009-2015) tuvo una dinámica primera mitad, pero una segunda mitad plagada de problemas políticos y presupuestales.

En los primeros tres años el Presidente de México era Calderón y en los segundos, el priísta Peña Nieto quien recuperaba para su partido las riendas del País después de doce años.

PETICIÓN PRESIDENCIAL

Desde la campaña por la Presidencia de la República en el periodo 2011-2012, la presión tricolor sobre el Gobierno padresista crecía.

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Cerro de la campana

El PRI hacía su parte desde el Congreso del Estado frenando desde finales del 2011 el presupuesto estatal 2012 que a final de cuentas no se aprobó, por lo que entró en funciones el llamado “presupuesto reconducido” que no fue otro más que el mismo del 2011. La administración padresista perdía fuerza, pero se movía.

La agenda del Gobierno estatal con el nuevo Gobierno federal no se detenía a nivel de secretarías, pero las vueltas a Los Pinos desaparecieron.

La tensión subía de tono con el propósito de ablandar al Gobierno panista.

El clímax del golpeteo fue cuando por órdenes del Presidente se le pidió al mandatario sonorense cerrar el Acueducto Independencia.

Padrés Elías recibió tal petición del titular de la Secretaría de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong. En automático el sonorense le contestó que no cerraría el acueducto y que en todo caso le cedía los derechos a la Federación.

La contrapropuesta molestó a Los Pinos y desde ahí “empezaba el infierno” para Padrés Elías.

Al cierre de su sexenio en el 2015, el Presidente le habría dicho al sonorense que no le daría 2 mil millones de pesos para el pago a proveedores; que en todo caso se los entregaría a Claudia Pavlovich.

Así el Gobierno panista cierra su administración “sin cinco” y deja embarcado a medio mundo; catorce meses después es encarcelado.

NI CON BOURS NI CON CPA

El PAN de Padrés Elías gana la gubernatura de Sonora en el 2009 con casi 40 mil votos de diferencia al priista Alfonso Elías Serrano, el candidato de Eduardo Bours.

Ante ello, el siguiente paso obligado era la etapa de transición, la cual por cierto nunca se llevó a cabo.

El Gobierno de Bours, muy a su estilo, se cerró a la nueva administración albiazul hasta el último día de su gestión. En la madrugada del 13 de septiembre del 2009 el Gobernador entrante recibió la oficina de su antecesor con una montaña de llaves sobre el escritorio.

Seis años más tarde el PRI recuperaba la gubernatura del Estado; Claudia Pavlovich Arellano superaba con más de 70 mil votos al panista Javier Gándara Magaña.

Al igual que Bours, la mandataria electa no siguió los protocolos de la transición y tomó posesión sin ver ni oír al panista, quien no dejaba de recibir cañonazos desde la Federación.

En el 2015 el PRI retomaba el poder en Sonora y los panistas sufrían la rudeza de la nueva autoridad estatal. Las acusaciones de corrupción surgían a diestra y siniestra y Padrés Elías fue encerrado en el Reclusorio Oriente de la Ciudad de México.

Tres años después los priistas sonorenses seguían festejando su regreso al Palacio del Estado y ante la falta de resultados y su poco respeto a los 425 mil votantes azules del 2015, sufrieron una dolorosa derrota en las urnas el 2018.

En el 2021 la debacle tricolor se consolidó en el Estado y ante la contundencia morenista el Gobierno saliente ahora sí atiende las mesas de transición. El PRI no se alineó con el PAN, pero si con Morena.

Javier Villegas Orpinela tiene maestría por el Itesm, economista UANL y diplomado en Northwestern University. Director de la revista Correo y profesor de Economía en la Unison.

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