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¿En qué te enfocas?

“No hay tal cosa como fracaso. Únicamente existen los resultados”. Tony Robbins.

Octavio  Ballesteros

Afirma Tomy Robbins, famoso coach de negocios, que una de las tres preguntas que debes hacerte continuamente es ¿en qué te enfocas?…y esto lo comenta ya que todo aquello en que ponemos la atención nos afecta, ya que el enfoque nos lleva a las emociones, y estas influyen mucho en nuestras decisiones.

VEAMOS

¿Por qué es importante donde dirigimos la atención, nuestro enfoque? Primordialmente hay dos cosas en las que nos enfocamos: a) en lo que tenemos, y b) en lo que nos falta. Cuando el enfoque es en lo que nos falta el sentimiento de amargura y de infelicidad está garantizado. Es por ello que, afirma Robbins, muchos famosos ya sea del mundo del espectáculo, de los negocios, de alto nivel social, a pesar de tener todo lo que un ser humano pretendiera tener son desdichados. Cuando el enfoque es en lo que se tiene, uno se la pasa agradeciendo por ello, se siente más energetizado, más vivo, más contento y satisfecho, por ende feliz.

El enfoque a lo que tenemos hay que provocarlo, el cerebro está ordenado a evitar los peligros, a pensar en lo peor. Por eso las noticias negativas tienen mucho éxito para llamar la atención.

LA SEGUNDA Y TERCERA

La segunda pregunta que hay que hacer es, ¿qué significado tiene lo que está pasando, qué sentido le das? Y dependiendo de la respuesta nos lleva entonces a la tercera pregunta: ¿qué acciones voy a tomar?

Pone Robbins un ejemplo conyugal: al inicio del matrimonio, al marido le pide su mujer que saque la basura de la casa, y después de siete meses, o de siete años, la mujer le pide lo mismo al marido y éste le contesta irritado “no soy tu mozo…”.

Aquí entonces hay que plantearnos, ¿estamos en el inicio de la relación, o en el final de la misma? Dependiendo del sentido que le damos sin duda serán las acciones que tomamos .

A MANERA DE RESUMEN

Enfócate en lo que tienes, y esto te llevará a un modo de agradecimiento por todo ello. Esto también deriva en que lleves tu atención a lo que puedas controlar, y por último lleva tu enfoque al balance entre presente y futuro. Vivir el presente te llevará a construir un mejor futuro, y ya encarrilados con esto terminarás teniendo un pasado que valió la pena. El problema es cuando tu enfoque está en el pasado, sobre todo en errores cometidos. Así no se llega muy lejos. ¿En qué te enfocas, estimado lector? ¡Feliz domingo!

*- El autor es socio del Despacho Asesores Ballesteros.

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