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Reo recibe clemencia horas antes de ser ejecutado en EU

Jimmy Fletcher Meders, de 58 años, fue declarado culpable de asesinato y condenado a muerte por el asesinato en octubre de 1987.

ATLANTA.- La junta de libertad condicional de Georgia el jueves salvó la vida de un prisionero solo unas horas antes de su ejecución programada, conmutando su sentencia a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.


Jimmy Fletcher Meders, de 58 años, había recibido una inyección letal a las 7 p.m. Jueves en la prisión estatal de Jackson. Pero la Junta Estatal de Indultos y Libertad Condicional emitió su decisión otorgándole clemencia alrededor de la 1 p.m.

Meders es solo el sexto recluso en el corredor de la muerte de Georgia que tiene una sentencia conmutada por la junta de libertad condicional desde 2002. El último en conmutar una sentencia fue Tommy Lee Waldrip, a quien se le evitó la ejecución el 9 de julio de 2014.

El abogado de Meders, Mike Admirand, del Centro del Sur para los Derechos Humanos, dijo en un comunicado enviado por correo electrónico que están "profundamente agradecidos" por la decisión de la junta.


"El papel críticamente importante de la junta para mostrar misericordia en estas raras circunstancias no puede ser exagerado", escribió Admirand. "Al tomar esta medida, esta junta de libertad condicional ha hecho realidad la intención del jurado de sentenciar a Jimmy a cadena perpetua sin libertad condicional, y no a la muerte".

Meders fue declarado culpable de asesinato y condenado a muerte por el asesinato en octubre de 1987 del empleado de una tienda de conveniencia Don Anderson en el condado costero de Glynn.

La junta de libertad condicional, que es la única autoridad en Georgia que puede conmutar una sentencia de muerte, celebró una audiencia de clemencia a puerta cerrada para Meders el miércoles. Según la orden de conmutación, la junta consideró la falta de antecedentes penales de Meders antes del asesinato de Anderson, el hecho de que solo tuvo una infracción menor durante 30 años en el corredor de la muerte, el deseo del jurado durante las deliberaciones de imponer una sentencia de cadena perpetua sin libertad condicional y El apoyo a la clemencia de los jurados que aún viven.


Meders pasó la tarde del 13 de octubre de 1987 bebiendo alcohol con tres hombres: Randy Harris, Bill Arnold y Greg Creel. Después de salir de Harris y conducir por horas, Meders, Creel y Arnold terminaron en una tienda cerca de las 2:30 de la mañana siguiente.

Mientras estaban allí, Anderson recibió un disparo mortal en el pecho y la cabeza, y se extrajeron más de $ 30 de la caja registradora, según las autoridades.

Meders testificó en su juicio que los tres hombres entraron, y que Arnold le disparó a Anderson y le dijo a Meders que tomara el efectivo. Arnold y Creel testificaron que solo Creel y Meders entraron a la tienda, y Meders le disparó al empleado y tomó el dinero.

Harris, que no estaba en la tienda, testificó que Meders le confesó después que "le había volado la cabeza a un hombre por más de $ 38".

Meders fue el único acusado del robo y asesinato.

Meders fue sentenciado a muerte en 1989, cuatro años antes de un cambio en la ley que permitía una sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional para casos capitales. En la solicitud de clemencia presentada a la junta de libertad condicional, sus abogados argumentaron que estaba claro que el jurado quería esa opción.


La solicitud citó una nota que los miembros del jurado enviaron al juez después de 20 minutos de deliberaciones: "Si el jurado recomienda que el acusado sea sentenciado a cadena perpetua, ¿puede recomendar el jurado que la sentencia se ejecute sin libertad condicional?"

Los abogados de Meders también reunieron declaraciones juradas de los seis miembros del jurado que aún están vivos y pueden recordar las deliberaciones. Todos dijeron que habrían elegido la vida sin libertad condicional si hubiera sido una opción y respaldado la clemencia para Meders.

Además, un análisis de los abogados de Meders de los casos de Georgia para los que se buscó la pena de muerte entre 2008 y 2018 muestra que en casos como el suyo, con una sola víctima y pocos factores agravantes, los jurados no eligen la pena de muerte hoy y los fiscales rara vez búscalo en tales casos.

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