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Rocas ligeras y pesadas

En el subsuelo está la maternidad de las rocas. Nacen del magma del interior de la corteza terrestre, material piroclástico de muy alta temperatura. Lo vemos cuando chorrea desde un volcán

En el subsuelo está la maternidad de las rocas. Nacen del magma del interior de la corteza terrestre, material piroclástico de muy alta temperatura. Lo vemos cuando chorrea desde un volcán. Es piedra líquida, minerales fundidos que al salir a la superficie se enfrían y solidifican. Los geólogos calculan que por cada mil metros que ascienden hacia la superficie, se enfrían 30°C.

El domingo pasado compartía con el ecológico lector las características del subsuelo, el movimiento de las placas tectónicas que no ha cesado desde que la gran Pangea o primera masa de tierra se fracturó y empezó a navegar cada pedazo de tierra sobre el magma líquido, cual océano pétreo.

Cuando vemos el mapa elaborado e imaginario de esa primera fractura, asombra ver como si juntamos a Sudamérica con África, la costa oriental de la primera encaja como pieza de rompecabeza con la occidental africana. Se antoja pensar que los primates sudamericanos son primos cercanos de los monos del nuevo Mundo. También que aquella ruptura separó al leopardo del jaguar. Pero no es así. Cuando se dio tal separación estos animales aún no existían.

Al leer el capítulo “El Origen” del último libro colectivo en el que participé en la UABC, coordinado por mis amigos y colegas doctores Everardo Garduño y Efraín Nieblas, me llamó la atención la aportación del geólogo del CICESE, doctor Arturo Martín Barajas, en este libro titulado Semejeel Jak, que en kiliwa quiere decir montaña arbolada.

Siempre me ha fascinado ver a las piedras “flotar”, así es, en mi caso, navegar en el archipiélago de Las Encantadas desde el islote “La Poma”, hasta las playas cercanas. En ocasiones son natas de poma las que se desprenden de tal islote. Si se conoce algo de geología y/o química, por su composición se sabe que alguna vez fue material que arrojó algún volcán ancestral. Pues la isla San Luis, tiene un hermoso cono volcánico, cual media Plaza de Toros pero visible sólo desde el aire o desde el mar, de su lado Oeste contrario a la costa. Entonces pudiese ser que La Poma es hija de este volcán ¿extinto?

La piedra pómez o pumita, es lava arrojada al aire en una erupción volcánica que se enfría y sufre una gran descompresión. Entonces se produce una desgasificación quedando huecos vacíos que le dan tan baja densidad y flotabilidad. Pero lo más interesante en este texto es saber que las rocas, aparte del fenómeno de la pómez, tienen distintas densidades. Las menos densas como el granito del Picacho del Diablo, pesan 2.64 gramos por centímetro cúbico y los basaltos del fondo marino pesan 2.9 gramos por centímetro cúbico. La pequeña diferencia de sólo .25 de gramo hace que unas se eleven hasta el Cielo y otras se hundan en el mar. Curiosamente, el granito es casi blanco como los ángeles; mientras que el basalto es oscuro como el demonio. La noción cultural de lo alto como deseable y lo bajo como castigo, en su versión geológica.

*- El autor es investigador ambiental independiente.

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