20 de mayo: día mundial de las abejas

Cada 20 de mayo se celebra el Día Mundial de las Abejas, una jornada dedicada a resaltar la importancia de estos polinizadores y a promover acciones para su conservación. Este año, el lema es “Abeja comprometida con los jóvenes”, destacando el papel fundamental que las nuevas generaciones pueden desempeñar en la protección de las abejas y otros polinizadores. La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) subraya que la participación juvenil es esencial para enfrentar los desafíos actuales y futuros que amenazan a las abejas.

La importancia de las abejas

Las abejas son responsables de la polinización de alrededor del 75% de los cultivos alimentarios que consume la humanidad. Su actividad no solo favorece la producción de frutas, verduras y frutos secos, sino que también influye indirectamente en productos como el queso y la carne.

Según la investigadora María Emilia Bravi, del Conicet:

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las abejas cumplen un montón de funciones beneficiosas para el ambiente y los seres humanos, y generan gran variedad de productos, pero estas cuestiones son poco conocidas”.

La polinización es un proceso ecológico vital en el que las abejas transfieren el polen entre las partes masculina y femenina de las flores, permitiendo así la fecundación de las plantas. Esto no solo aumenta la producción de cultivos, sino que también mantiene la biodiversidad y los ecosistemas saludables.

Amenazas para las abejas

Las abejas están en peligro. Las tasas de extinción de especies son alarmantes, siendo entre 100 y 1.000 veces superiores a las normales debido al impacto de actividades humanas. Entre los principales factores que las afectan se encuentran la pérdida de hábitat, el uso de pesticidas, la disminución de la diversidad floral y la amenaza de parásitos como el Varroa destructor. Este ácaro debilita las colmenas al alimentarse del cuerpo graso de las abejas y es vector de varios virus dañinos, como el virus de las alas deformadas y el de la cría ensacada.

El rol de los jóvenes

La FAO enfatiza que los jóvenes pueden ser agentes de cambio cruciales para la conservación de las abejas. Involucrarse en la apicultura, apoyar prácticas agrícolas sostenibles y educar a sus comunidades sobre la importancia de los polinizadores son algunas de las acciones que pueden tomar. En Argentina, ya se están implementando iniciativas en Mar del Plata y el Alto Valle del Río Negro, donde apicultores trasladan colmenas a zonas de cultivos para asegurar una polinización natural y rentable.

Recomendaciones para proteger a las abejas

La FAO propone varias medidas que todos podemos adoptar para ayudar a las abejas:

• Plantar una diversidad de plantas autóctonas que florezcan en diferentes épocas del año.
• Comprar miel cruda de agricultores locales y productos de prácticas agrícolas sostenibles.
• Evitar el uso de pesticidas, fungicidas y herbicidas en jardines.
• Proteger las colonias de abejas silvestres y apadrinar colmenas.
• Colocar cuencos de agua para abejas en exteriores.
• Sensibilizar y compartir información sobre la importancia de las abejas en la comunidad y las redes sociales.

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Una especie fundamental

Las abejas son insectos sociales que viven en colonias organizadas en una estricta jerarquía de abejas obreras, zánganos y una abeja reina. Con más de 20,000 subespecies, habitan en todos los continentes excepto en la Antártida y han existido durante más de 30 millones de años. Además de su papel crucial en la polinización, han proporcionado miel y cera a la humanidad desde tiempos inmemoriales.

Sin embargo, las abejas no son solo pequeños robots que responden a estímulos. Investigaciones recientes, como la publicada en la revista Animal Behaviour, sugieren que los abejorros disfrutan realizando actividades como rodar pelotas de madera, mostrando comportamientos complejos que pueden ser placenteros.

Con información de Natgeo.