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Porque puede

La lucha es compleja, añeja, profunda, tiene muchas aristas legales, políticas y sociales. Eso queda claro

¿Por qué el presidente López Obrador le permitirá a Napoleón Gómez Urrutia hacerle daño a un pueblo como Cananea?

¿Por qué el senador de Morena, en el cargo por obra y gracia del mismo Presidente, se siente y al parecer tiene el poder para meter en aprietos al gobernador Alfonso Durazo?

¿Por qué el Presidente le permite a Napo tratar así a su amigo el Gobernador de Sonora?

¿Por qué venir a sitiar una ciudad completa por tres días con toda impunidad, poner de rodillas al Gobierno federal y lanzarse a la yugular del mandatario estatal?

En primer lugar, pues porque puede. Demostrado está.

Se logran poner en el primer plano, le ponen agenda al Presidente que abordó el asunto en su mañanera del jueves.

Logran sentar al secretario de Gobernación, a la del Trabajo, junto al mismo Durazo, para luego presumir en sus redes que ha dado frutos la presión que ejercieron hacia el Gobierno.

Válgame Dios!!!

Qué envidia han de sentir los ejidatarios desplazados para el paso del Tren Maya, los padres de los niños con cáncer, las madres buscadoras, las madres y padres de la guardería ABC, los pequeños comerciantes que se quedaron en la ruina por la pandemia, los colectivos de mujeres que piden diálogo y respeto, las familias desplazadas por el narco, las víctimas colaterales de la delincuencia.

Cuanta envidia han de sentir que los mineros al mando de Gómez Urrutia consiguieron lo que ellos no han podido en años:

Una respuesta pronta de este Gobierno.

No es justo que le hagan eso a un Municipio al que le debemos tanto en materia de lucha por los derechos de los trabajadores.

Vaya, no es justo tampoco lo que le hicieron al Gobernador de venir a causar un problema en Sonora y menos aún la forma en que se expresaron de él y de la secretaria del Trabajo, María Luisa Alcalde.

Y con todo y las ofensas, tener que ir a una mesa de negociación con ellos.

La lucha es compleja, añeja, profunda, tiene muchas aristas legales, políticas y sociales. Eso queda claro.

Pero al final podemos ver que el líder minero, que lo es por herencia de su padre que acumuló poder al amparo de los gobiernos del PRI, por si no se acordaban, pega un manotazo en la mesa y mueve al gabinete federal.

Usa el poder político que el mismo partido en el Gobierno le dio, al rescatarlo del exilio en Canadá, traerlo de vuelta al País y darle fuero.

Lamentable.

Al final, son el mismo Gobernador y la misma secretaria del Trabajo quienes con más tacto político y en mucho mejor tono, con más clase pues, salen a decir que se seguirá el diálogo para resolver las viejas demandar de los mineros.

Que por cierto, Durazo ya estaba en gestiones para ese encuentro con Segob y aun así van y bloquean Cananea.

POR FIN

Miren, la regularización de los carros "chocolate" causa sentimientos encontrados, sobre todo en los sectores de la economía del ramo automotriz.

Sin duda no parece ser justo para ellos ni para los cientos de miles de dueños de carros legales que pagan impuestos y derechos.

Pero es la medida correcta, la única viable.

Finalmente se ha publicado el decreto para regularizar esos vehículos y los posesionarios tendrán ahora una certeza legal sobre sus unidades.

Habrá una generosa entrada de dinero al Gobierno que además permitirá flujo hacia muchos municipios que necesitan urgentemente pavimentar sus calles.

O al menos eso se dijo, nomás que no quieran meter ese recurso en una licuadora como lo hicieron con el Fondo Minero, que si bien las empresas han seguido pagando sus impuestos, el beneficio para los municipios desapareció.

En fin, que no se podía hacer otra cosa más que eso: Legalizar por fin esos carros.

Y ahí cuelan buenos y malos. Personas con una necesidad real junto con otros que sólo se han aprovechado de lo laxo que ha sido el Gobierno para cuidar nuestra frontera con los Estados Unidos.

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