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Cerro de La Campana

En medio de ese repunte de casos en la entidad es importante lo que reportan las autoridades de Salud estatal

La atención tardada en hospitales, la escasez de pruebas, el récord de casos confirmados, el ausentismo escolar y laboral son parte de las consecuencias que está dejando esta cuarta ola de Covid-19.

En México el panorama es complicado: De un promedio de 6 mil casos diarios el 3 de enero pasado, se reportaron ayer 33 mil 626 casos confirmados; mientras que en Sonora se alcanzó de nuevo una cifra histórica con 998 contagios registrados ayer.

Esos son sólo los datos oficiales de casos detectados con pruebas, porque hay muchas personas que no han tenido oportunidad de tener una prueba en centros de salud públicos y les dan recomendaciones para seguir en casa.

En medio de ese repunte de casos en la entidad es importante lo que reportan las autoridades de Salud estatal, porque indican que ayer no hubo defunciones y que los casos graves no van en aumento.

Por cierto, también reconoce que en el País hay una escasez de pruebas de Covid-19, como ya ha sucedido en otras naciones, de acuerdo con lo informado por el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell quien ayer dijo que “si no se tienen razones médicas por las que sea imprescindible corroborar un contagio, lo mejor es aislarse siete días y estar pendientes de la oxigenación y temperatura”.

No sólo los alimentos y los impuestos, también los materiales para la construcción están en la ola de aumentos de precios, lo que tendría impacto para sectores como los desarrolladores de vivienda y en general en la obra pública y privada.

A nivel internacional, productos como el cemento, el acero, el cobre, el aluminio, la madera y el plástico han tenido incrementos en sus precios, por lo que también repercutirá en el País.

Se trata de una cadena de alza de costos de materias primas en la industria de la construcción que le pegará al sector, por lo que habrá que estar atentos a si hay ajustes en las inversiones, principalmente de los gobiernos, que tienen presupuestos definidos para este año.

Francisco Solares Alemán, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), advierte que el escenario es difícil para los empresarios del sector porque están enfrentando una inflación superior en 10 puntos a la de la economía nacional en general.

El litio sigue en la mira del Gobierno federal con la iniciativa que pretende que quede bajo el dominio de la Nación, lo que genera incertidumbre en el sector sobre lo que se decidirá en esta materia.

Este mineral genera interés a nivel mundial y, de acuerdo con el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, hay ocho solicitudes de permisos para explorar posibles depósitos en el territorio nacional en San Luis Potosí y otras regiones, que están a la espera.

Lo que se reiteró ayer es que los permisos que se hayan otorgado antes de la presentación de la reforma los van a respetar y seguirán vigentes. También el presidente Andrés Manuel López Obrador había advertido que si no se aprobaba la iniciativa de ley que envió para que el litio sea propiedad de la Nación, entonces negaría las concesiones.

En Sonora, en la región de Bacadéhuachi está un depósito de litio que cuenta con todas las certificaciones y que se ha anunciado empezará su producción el año próximo y que estaría al margen de esta postura federal, porque las empresas a cargo de este proyecto minero, entre ellas la firma china Gangfeng, obtuvieron sus autorizaciones previo a la iniciativa presidencial.

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